¿Por qué ha mejorado la credibilidad del Banco de Inglaterra pese a la retirada de la forward guidance?

Jim_Leaviss
Foto cedida

Los expertos de M&G Investments han decidido utilizar las encuestas sobre inflación que realizan trimestralmente en Reino Unido, Europa y Asia con la colaboración de la agencia internacional YouGov para medir también el grado de credibilidad de los bancos centrales, en particular el BCE y el Banco de Inglaterra. El resultado no ha podido ser más sorprendente, como explica en una entrada de Bond Vigilantes Jim Leaviss, director de renta fija minorista de M&G. 

Algunas de las preguntas que se introdujeron para medir el grado de credibilidad de las políticas monetarias han versado sobre cómo percibe la gente la capacidad de los bancos centrales para cumplir con su objetivo de inflación, o la posible efectividad de las políticas fiscales del gobierno. “Probablemente no se sorprenda de oír que en general los europeos no tienen una opinión elevada del BCE o de sus políticos”, señala Leaviss. “Pero es en Reino Unido donde se ha visto la mayor mejora del sentimiento hacia su banco central”. 

La encuesta refleja que, coincidiendo con el nombramiento de Mark Carney como gobernador del Banco de Inglaterra a finales de noviembre de 2012, un 28% de los más de 2.000 encuestados (excluyendo los “no sabe/no contesta”) se mostraban confiados en que la autoridad monetaria británica estuviera dando los pasos correctos para cumplir su objetivo de inflación. Carney no tomó posesión del cargo hasta el 1 de julio de 2013, y sin embargo en ese periodo comprendido entre noviembre de 2012 y julio de 2013 los resultados trimestrales de la encuestra siguieron subiendo, y lo han hecho después también. La última encuesta sobre inflación, publicada en enero, mostraba que ya suponía un 55% el número de encuestados que creen que el BoE está siguiendo el camino adecuado para garantizar la estabilidad de precios a medio plazo. 

Leaviss no puede menos que preguntarse por qué casi se ha doblado la proporción de “aprobados” a las políticas de la Vieja Dama, habida cuenta de que la credibilidad del banco central se ha puesto en entredicho después de que Carney decidiera abandonar la política de visibilidad o forward guidance sólo 7 meses después de haberla adoptado. 

“Bueno, es la economía”, se responde Leaviss. “El Reino Unido ha sido una de las economías desarrolladas de crecimiento más rápido del mundo durante el último año, con un crecimiento de PIB del 2,7% interanual, después de un par de años en los que parecía que se quedaría atrapado en el 1% o por debajo”, destaca el gestor. 

“Crucialmente, cuando se piensa sobre la credibilidad, por primera vez desde las profundidades de la crisis financiera en 2009, el IPC está por debajo del objetivo del 2% de inflación del BoE. En un punto de 2011, el IPC llegó a estar por encima del 5% interanual”, continúa Leaviss. Éste también observa que, mientras que los salarios reales siguen a la baja, los nominales han empezado a repuntar en los últimos meses, por lo que el impacto sobre los trabajadores es menor. 

El experto se apoya en otro dato para constatar el incremento de la credibilidad del BoE, la evolución del índice de gilts ligados a la inflación (donde los precios están fijados sobre el RPI en vez del IPC). La tasa de inflación a 5 años vista – el precio que pone el mercado para la tasa media de inflación para el periodo entre 2019 y 2024- se sitúa en el 3,35%, frente al 3,65% de noviembre del año pasado. Leaviss calcula en base a estas cifras que la previsión sobre el IPC para el medio plazo se sitúa en el 2,25%. “Es un poco por encima del objetivo, pero dada la historia del Banco de grandes fallos al alza en los años recientes, podría reflejar una mejora de la credibilidad. Sin embargo, debería decirse que esta medida ha sido generalmente bastante estable (media a 5 años del 3,5%), por lo que no parece que sea un signo significativo de credibilidad de la gestión de Mervin King frente a Carney”, concluye el director de renta fija minorista de M&G.