¿Por qué la depreciación del euro es tan importante para la bolsa europea? Renta 4 da su visión bursátil

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Images_of_Money, Flickr, Creative Commons

Las revisiones a la baja de los beneficios esperados por las compañías europeas para 2014 -desde un 14% hasta un 5%- ha vuelto a provocar cierto desasosiego en los inversores de bolsa europea, que “teníamos la impresión de que la recuperación de Europa, junto al crecimiento del resto del mundo, haría recuperar gran parte del terreno perdido en estos años de crisis económica”, señala el equipo de gestores de Renta 4 Gestora.

Una buena parte de esta decepción está motivada por la fortaleza del euro, especialmente, frente al dólar y a divisas de países emergentes. Sin embargo, este enroque del euro puede verse afectado gracias a las nuevas medidas del BCE, que van en la dirección de debilitar la moneda única europea para ganar en competitividad.

Como pone de manifiesto Renta 4 Gestora, la depreciación del euro ayudaría a las tres variables que más podrían repercutir en la mejora de los fundamentales europeos: “generar crecimiento económico, evitar la tan temida deflación e incrementar los beneficios empresariales”, enumeran sus expertos.

Desde una óptica bursátil, recuerda la firma española, más del 40% de las ventas de las compañías europeas provienen de fuera de Europa, por lo que “la mejora de la partida de ingresos tiene un efecto inmediato en las cuentas”.

Las nuevas medidas del BCE, más tardías en comparación con las implementadas por sus homólogos desarrollados -Fed, BoJ y BoE-, tienen precedentes donde mirarse. “Estados Unidos, Japón y Gran Bretaña han salido antes de la recesión, entre otras cosas, por los macro estímulos monetarios de sus bancos centrales para desapalancar a sus bancos, debilitar su moneda e incentivar la inversión y el consumo”, apunta Renta 4 Gestora.

Optimismo para el final de 2014 y el 2015

Durante los últimos meses, países del Viejo Continente como Francia e Italia “muestran un deterioro de expectativas empresariales que, obviamente, preocupa a inversores, gobiernos y al BCE”. No obstante, tranquilizan los gestores de la firma española, “es razonable esperar que las compañías que han defraudado estos últimos meses debido a la comparación negativa del efecto divisa sean las que mejor comportamiento tengan si este efecto revierte a positivo” a lo largo del último trimestre de 2014 y el 2015.