"Pronostico una fuerte demanda institucional por los bonos convertibles"

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Foto cedida

Los bonos convertibles generaron un retorno cercano al 15% en 2013. Martin Kuehle, director de inversiones de bonos convertibles en Schroders, analiza qué perspectivas presenta esta clase de activo de cara a 2014. “Esperamos sólidos mercados de renta variable, pero la volatilidad se incrementará y los contratiempos podrían ser potencialmente mayores de los que hemos visto en verano de 2013”, avanza el experto. Para Kuehle, la mayor fuente de riesgo será el estrés de los mercados de renta fija y variable, aunque considera difícil detectar cuál será el desencadenante.

No obstante, como constata que ya están resueltos o en vías de resolución algunos de los eventos que sacudieron a los mercados en 2013 – la guerra en Siria, la regulación bancaria en Europa, el techo de la deuda en Estados Unidos-, el responsable muestra su creencia de que los convertibles volverán a ser una de las mejores clases de activos en este entorno porque ofrecen “protección contra tipos de interés, inclinación por el crecimiento estratégico y participación en bolsa a través de una opción de largo plazo, a la par que una fuerte selección de crédito que proporcionará a los inversores una buena mezcla de exposición a renta variable y seguridad”. 

Dentro de las perspectivas para el mercado primario, Kuehle señala que las nuevas emisiones serán cruciales no sólo para sostener la diversidad de este mercado, sino también como una buena fuente de generación de alfa. “Esperamos que las emisiones de convertibles continúen señalando el camino para los sectores interesantes (cloud computing de Estados Unidos y biotecnología fueron ejemplos en 2013) y prevemos que la fuerte actividad emisora de los últimos meses continúe hasta bien entrado 2014”, añade el experto de Schroders. 

En cuanto a la demanda por este tipo de bonos, Kuehle observa que los convertibles siguen ofreciendo una solución tanto para los inversores que aún no tienen suficiente apetito por el riesgo como para comprar renta variable como para los que están restringidos por razones regulatorias. En este sentido, pronostica "una fuerte demanda institucional por convertibles", tanto de forma aislada como por bloques para carteras de renta fija.