ALFI cree que una prioridad clave es fortalecer los sistemas de pensiones, complementando los modelos de reparto con esquemas de pensiones financiadas y promoviendo las pensiones ocupacionales del segundo pilar.
En un comunicado lanzado ante la inminente presentación del Savings and Investment Union por parte de la Comisión Europea, la Asociación de Fondos de Luxemburgo (ALFI) pide políticas y estrategias adecuadas para que el continente puede abrir una nueva era de crecimiento económico y empoderamiento financiero. En su opinión, la SIU debe centrarse en movilizar los ahorros minoristas, convirtiendo el efectivo inactivo en inversiones dinámicas. Y una prioridad clave es fortalecer los sistemas de pensiones, complementando los modelos de reparto con esquemas de pensiones financiadas y promoviendo las pensiones ocupacionales del segundo pilar.
Los mercados de capitales europeos están en un momento decisivo, sentencia ALFI. “A pesar de que los europeos ahorran una gran parte de sus ingresos, estos fondos no se invierten de manera eficiente. Mientras que en otras regiones la riqueza de los hogares se canaliza activamente hacia inversiones, en Europa la mayoría de los activos financieros permanecen inmovilizados en cuentas de efectivo y ahorro”, advierten en un comunicado.
Recomendaciones de ALFI para la SIU
Activar los 33,5 billones de euros en activos financieros de los hogares europeos permitiría acelerar el crecimiento económico y potenciar el empoderamiento financiero. Para lograrlo, ALFI ve fundamental desbloquear el potencial del ahorro minorista, especialmente mediante la promoción de pensiones ocupacionales del segundo pilar con inscripción automática, soluciones de inversión adecuadas y beneficios fiscales específicos. “Estas iniciativas no solo beneficiarían a los ciudadanos, sino que también impulsarían el crecimiento económico y la estabilidad financiera en toda Europa”, vaticinan.
Para fomentar una verdadera cultura de inversión en Europa, ALFI recomienda una serie de medidas concretas para movilizar el ahorro, estimular la inversión y fomentar el crecimiento económico a largo plazo. “Aunque muchas de estas iniciativas dependen de los gobiernos nacionales, las instituciones de la UE pueden desempeñar un papel clave en la orientación y promoción de reformas fundamentales”, añaden.
A) Movilizar a las nuevas generaciones
- Educación financiera en las escuelas: Introducir formación obligatoria sobre los fundamentos de la inversión, incluyendo rendimientos compuestos, inversión a largo plazo y gestión de riesgos.
- Cuentas de inversión para menores: Fomentar el uso de cuentas de inversión en lugar de cuentas de ahorro, incentivando hábitos de inversión desde una edad temprana.
- Cultura de inversión: Organizar eventos y competiciones anuales para estudiantes, premiando a los mejores gestores de carteras ficticias con contribuciones a sus cuentas de inversión.
- Campaña de educación financiera a nivel de la UE: Abordar la alfabetización financiera de los adultos para apoyar reformas en pensiones y capacitar a los ciudadanos en la toma de decisiones de inversión informadas.
B) Fortalecimiento de los sistemas de pensiones europeos
Ante los desafíos demográficos, la modernización de los sistemas de pensiones, en especial los esquemas del segundo pilar, ALFI ve crucial crear:
- Herramienta de seguimiento de pensiones: Crear una plataforma a nivel de la UE para rastrear pensiones de primer pilar y, posteriormente, del segundo y tercer pilar, ofreciendo previsiones de jubilación claras y basadas en reglas demográficas transparentes.
- Marco de mejores prácticas: Enfatizar la transparencia, eficiencia, elegibilidad amplia y participación simplificada de empleados y empleadores en los planes de pensiones.
- Competencia y libertad de elección: Los planes de pensiones del segundo pilar deberían estar disponibles a través de múltiples proveedores (bancos, aseguradoras, gestores de activos) para garantizar costos competitivos. Los beneficiarios deben poder elegir sus asignaciones e instrumentos de inversión, lo que ha demostrado mejorar la educación financiera y la participación en los mercados.
- Estrategias de inversión y opciones por defecto: Limitar los productos con garantía de capital a quienes estén próximos a la jubilación, dado su bajo rendimiento. Las opciones de inversión predeterminadas deben centrarse en el crecimiento a largo plazo, con mayor exposición a renta variable para los jóvenes y estrategias de inversión basadas en el ciclo de vida. Los proveedores deben ofrecer herramientas de orientación y carteras modelo para ayudar a los empleados a tomar decisiones informadas.
- Apoyo a la economía real: Los planes de pensiones deben permitir asignaciones a inversiones en activos privados.
- Fomentar la inscripción automática y la portabilidad: Implementar la inscripción automática, con contribuciones obligatorias de empleados y empleadores, respaldadas por incentivos fiscales específicos. Asimismo, garantizar la movilidad transfronteriza de las pensiones y un tratamiento fiscal coherente ayudará a canalizar los depósitos bancarios hacia la economía.
- Mejorar los marcos de IORP (Institutions for Occupational Retirement Provisions) y los PEPP (Pan-European Personal Pension Product): Eliminar barreras regulatorias para facilitar soluciones de pensiones transfronterizas, permitiendo un producto de pensión unificado y escalable que simplifique el ahorro para la jubilación.
c) Cuentas de Ahorro para la Inversión
Las cuentas de ahorro para la inversión que pide ALFI pueden ser una vía adicional para acceder a productos de ahorro o esquemas de pensiones del tercer pilar, combinados con incentivos fiscales específicos. Debería:
- Cubrir una amplia gama de activos como acciones, bonos, UCITS y ETF, permitiendo inversiones en activos privados a través de fondos alternativos (AIFs) o ELTIF.
- Ser accesibles a través de bancos, aseguradoras, gestores de fondos de inversión y firmas de inversión.
- Estar disponibles para menores, fomentando la educación financiera temprana.
- Operar con un tratamiento fiscal uniforme y sencillo, con aportaciones deducibles y crecimiento libre de impuestos.
- Evitar restricciones innecesarias, como límites de comisiones o asignaciones obligatorias de inversión en la UE.
“Las cuentas de ahorro para la inversión representan un modelo probado que puede implementarse sin la complejidad de nuevas etiquetas o agencias”, defienden desde ALFI
D) Convergencia supervisora, no centralización
Por último, ALFI apoya la convergencia regulatoria, pero manteniendo la experiencia nacional y preservando un modelo de supervisión descentralizado. “Las autoridades nacionales deben conservar su agilidad y capacidad de adaptación en la regulación de la gestión de activos. Un organismo supervisor centralizado añadiría complejidad y costos sin abordar las barreras existentes para la distribución de fondos en Europa. Modificar el marco de supervisión actual no generaría un aumento en la inversión en los mercados de capitales europeos y sería una distracción innecesaria”, argumentan.
Un reto y una oportunidad
Europa, insisten, tiene delante tanto un desafío como una oportunidad. “Actualmente, 10 billones de euros de la riqueza de los hogares europeos (41%) se mantienen en efectivo y cuentas de ahorro, en comparación con 13 billones de euros (16%) en EE. UU. Esta diferencia subraya la necesidad de movilizar estos fondos hacia inversiones productivas”, subrayan.