Razones por las que apostar por el mercado de acciones de Europa Emergente

A medida que Europa Emergente prospera, se apuntala la base de beneficios crecientes y los flujos de efectivo de las compañías. Este entorno, a su vez, permitirá a las empresas la oportunidad de fortalecer sus modelos de negocio, implementar las mejores prácticas y aumentar la rentabilidad para los accionistas. Así lo cree Nathan Griffiths, gestor de inversiones senior en ING Investment Management, quien reconoce que “desde la creciente clase media en Rusia hasta la población joven y vibrante de Turquía vemos un entorno no lastrado por la incertidumbre fiscal y las iniciativas de austeridad exigidas en Europa Occidental. También existe un sistema financiero solvente, finanzas públicas fuertes y una creciente penetración del crédito, todo lo cual traerá un crecimiento sostenible de los países de Europa Emergente”, afirma.

En la gestora destacan que la clase media continuará creciendo por la mayor creación de puestos de trabajo y el aumento de los salarios. Como consecuencia se extiende la riqueza y el consumo comienza a reflejar los patrones y posibilidades “importados” del mundo desarrollado. “La población joven de Turquía sustenta un entorno de fuerte crecimiento interno mientras que la proximidad geográfica a los cercanos mercados de todo el Oriente Medio y África ofrece un interesante potencial transfronterizo. Turquía también se beneficia de un sector corporativo desarrollado y bien formado, ansioso por aprovechar las oportunidades y expandirse”, señala.

"Mientras tanto, Rusia es un beneficiario de la prosperidad de Asia y el crecimiento como líder en la producción de  productos energéticos y agrícolas. Otra de las claves, pero tal vez menos apreciado, es el crecimiento de la clase media rusa que impulsará el consumo interno y el crecimiento del crédito”. En este sentido, Griffiths considera que la reforma de los mercados financieros aumentará el capital extranjero y la inversión. “Rusia se convertirá en un mejor lugar para hacer negocios a medida que la burocracia y la corrupción sigan disminuyendo”, indica.

En términos generales, el experto afirma que Europa Central continúa beneficiándose de la convergencia con la UE, pero con un sistema financiero más fuerte y una situación fiscal solvente. “Mientras la austeridad en Europa Occidental conducirá inevitablemente a un crecimiento más lento y menor gasto en inversión en la región, las tendencias a largo plazo en Europa Central, como el aumento de los niveles de ingresos y el desarrollo constante de los modelos de negocio siguen ofreciendo interesantes oportunidades de inversión”.

En lo que respecta a los mercados de activos en la Europa Emergente, ING IM espera que sigan siendo sensibles a la evolución económica mundial, en gran parte debido a su necesidad relativa de capital y su fuerte relación con los movimientos en las materias primas. “A medida que los procesos de reformas continúen en forma de más privatizaciones, mejoras del gobierno corporativo y una mayor protección de los accionistas, la sensibilidad frente al riesgo global disminuirá y proporcionarán resultados menos volátiles”, revela el experto.

El mercado más atractivo es…

Griffiths considera que, a pesar de esta sensibilidad, Rusia se destaca por su exposición relativamente baja a los problemas que actualmente experimenta la eurozona, mientras que su exposición al mercado de la energía continuará firme. “Las valoraciones en Rusia son atractivas y su evolución macroeconómica sigue mostrando fortaleza”. Por otro lado, el experto asegura que "la Bolsa Turca seguirá siendo guiada tanto por factores externos e internos, con la eurozona dominando el escenario externo, mientras que la política monetaria y la inflación serán claves a nivel nacional”.

"Los mercados en Europa Central, como Polonia y Hungría, están cada vez más entrelazados con la Europa Occidental y, por tanto, es probable que la evolución de la eurozona tenga un mayor impacto en estos países que en otros lugares”. ING IM observa que la valoración de las acciones en toda la región sigue siendo atractiva en comparación con sus pares del mercado global y emergente, a pesar de que los mercados se mantengan por debajo de los niveles previos a 2008 si lo comparamos con los mercados emergentes globales.

Con sede en La Haya, los gestores del ING Invest Emerging Europe cuentan con el apoyo del Equipo de Global Equity Research de ING IM, 24 analistas sectoriales con un promedio de 14 años de experiencia. El ING Invest Emerging Europe cuenta con 5 Estrellas Morningstar y figura en los rankings de Citywire (septiembre 2012) en las posiciones 17 de 132 a un año y seis de 102 Fondos en el plazo de tres años.