No hay ya mesa de debate que se precie que no dedique, aunque sea unos minutos, a reflexionar sobre la incorporación de criterios ASG en el proceso de inversión. Varios gestores debaten sobre las tendencias en el mundo de la renta fija, el papel de la regulación y nos cuentan qué tipo de fondos prefieren para sus carteras, ¿artículo 8 o 9? Y lo hacen en un desayuno organizado por FundsPeople y patrocinado por el equipo de SPDR ETF de State Street Global Advisors (SSGA).
Renta fija ASG, un activo en constante evolución

“La demanda que tenemos por parte de los clientes que compran nuestros fondos de pensiones, de inversión, unit linked… de factores ASG está creciendo de forma exponencial. De hecho, más del 30% de la nueva producción que hacemos en Mapfre tiene características ASG”, afirma Javier Lendines, director general de Mapfre AM. Sobre la regulación, reconoce que es complicado que a un gestor le guste, pero también está convencido de que es necesaria. “Tiene que seguir avanzando y perseguir el greenwashing, que a día de hoy está muy presente”.
También comenta que prefieren productos calificados como artículo 9 bajo el SFDR, pero reconocen que es complicado porque hay poco mercado. Ante esta situación, “lo que hacemos es intentar buscar entre los fondos que incorporamos a las carteras estrategias artículo 8”. A su juicio, queda mucho camino por recorrer en materia de ASG. No obstante, “se están dando pasos, y todas las casas estamos dedicando mucho tiempo y recursos a todo lo relacionado con la ISR y lo que lleva aparejado”.
1/5Luis Merino, responsable de Fondos de Fondos y Renta Fija en Santalucía AM, comenta que “hay una gran escasez de bonos ASG en los universos invertibles. Solo en torno al 5%-6%, como mucho el 10% del mercado, dependiendo del nicho que analicemos, son verdes. Es decir, si tienes una demanda creciente de este tipo de deuda, como efectivamente tenemos, te encuentras con que no hay suficiente oferta”. Explica que en el mundo corporativo hay un desequilibrio entre oferta y demanda. Y en consecuencia, “nos encontramos con que hay un riesgo de burbuja en estos activos antes de que empiecen a rodar, o bien nos enfrentamos a que el precio sea desincentivador”.
Antes esta situación, favorecen aproximaciones flexibles a este universo de inversión, por lo que prefieren fondos artículo 8 a 9. Eso en Europa, en el mercado americano, donde la implantación de la ASG está más retrasada, “estamos viendo cómo las gestoras que quieren distribuir sus fondos en Europa se están viendo obligadas a cumplir con la regulación europea”. Considera muy relevante esa migración del mercado americano: “Si ellos entran en la ASG, aunque sea solo por los productos que quieren distribuir en Europa, esa tendencia seguirá, es inevitable, y es algo que hay que gestionar con cuidado”.
2/5Mariela Palomera, gestora de inversiones en CaixaBank AM, destaca que se están viendo muchos flujos y un crecimiento importante de la ASG en la parte de renta fija corporativa. Hay mucha demanda, y también crece el número de emisiones. “Eso está permitiendo que se pueda gestionar mejor porque están saliendo emisiones a lo largo de toda la estructura de capital, no solo bonos sénior, también empieza a haber emisiones de bonos sociales y sostenibles en subordinados, incluso en algunos Cocos”. Además, añade que se ha desarrollado mucho la parte de gobiernos con bonos supranacionales, agencias gubernamentales y comunidades autónomas; “se ha quedado algo más rezagada la emisión de países como tal, pero ya también se empiezan a ver en Italia, Alemania o España, que debutó en septiembre con un 20 años que tuvo muy buena acogida”.
Respecto a las duraciones, comenta que las emisiones de impacto suelen ser de plazos más largos (con un vencimiento de media de 6-7 años). Emisiones cortas también hay, “pero el que las tiene no las suelta, es difícil conseguir papel. Esa parte corta en emisiones verdes está más ilíquida”.
3/5
“La ASG no lleva tanto tiempo entre nosotros, y todos los inicios son complicados”, reflexiona Alberto García, portfolio manager de Santander AM, quien añade que estas dificultades se aprecian, sobre todo, en las diferentes metodologías que existen a la hora de hacer análisis”. Esta es la parte negativa de todos los comienzos. Pero también la hay positiva. Destaca la incorporación en el test de idoneidad de los bancos la pregunta a los clientes de si quieren inversiones sostenibles, algo que considera un avance.
Respecto a la normativa, considera que queda mucho por hacer, pero también reconoce que se están dando pasos hacia adelante. Y en relación a los artículos 8 y 9, también insiste en que falta mucho trabajo que realizar en la definición de lo que entra dentro del artículo 8, más laxo que el 9. “No tendremos una visión clara hasta que no se defina bien qué es cada tipo”.
4/5Ana Concejero, jefe de SPDR para España, la división de ETF de SSGA, pone sobre la mesa los datos que muestran el creciente interés de los inversores por ETF de deuda y, en concreto, por los que tienen características ASG. “Este año han entrado en fondos cotizados de renta fija unos 36.000 millones de dólares hasta la fecha, y la mitad de ellos, unos 16.000 millones, se ha ido a la inversión ASG. Y dentro de ello, la deuda corporativa ha acaparado estas compras”.
Comenta que SSGA es una casa de perfil conservador y pone mucha atención en la construcción de los instrumentos y su clasificación. La gama de ETF de renta fija ASG con los que cuenta la gestora son artículo 8, siguiendo la metodología best in class. “Una encuesta reciente que hemos realizado entre inversores institucionales destaca la preferencia del mercado por moverse de metodologías ASG por exclusiones a best in class”.
Reflexiona también sobre la disparidad de los datos. “En State Street, una casa cuantitativa, hemos creado nuestra propia herramienta, R-Factor (Factor de Responsabilidad), un agregador de datos ASG, al que seguimos incorporando más fuentes de datos para con ese R-Factor incluir el best in class y asegurarnos de que podemos ofrecer a los clientes bloques de asignación de activos con un perfil de riesgo-retorno similar al su benchmark de base y así poder realizar la sustitución de exposiciones”.
Explica que en la parte de renta fija la andadura de la gestora comenzó hace un año con la gama Investment Grade ESG: el producto americano ha alcanzado los 5.700 millones de dólares, mientras que el europeo tiene 112 millones, “pero está creciendo y esperamos que pronto alcance el patrimonio mínimo que necesitan las gestoras para incorporarlos a las carteras”. En cuanto a los costes, asegura que la entidad está haciendo esfuerzos para sacar los instrumentos con unas tarifas menores: “Es así cuando los llamados switches (intercambio de posiciones entre ETF tradicionales y ASG) tienen sentido. No solo se trata de añadir sostenibilidad a la muestra sino también de reducir los costes de gestión”.
5/5