Rudi Van den Eynde (Candriam) “En la inversión temática es fundamental que el tema que escojas vaya a seguir siendo relevante durante varios años”

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Foto cedida

Rudi Van den Eynde es el responsable de inversión temática en Candriam. La inversión temática es una de las tendencias actuales de la industria de gestión de activos, una evolución de la inversión sectorial, aunque no toda idea de inversión puede convertirse en el germen de una temática.

“La inversión temática suele tener un impacto en diversos sectores, aunque depende del tema. Hay temas que son muy interesantes, pero en términos de compañías no son muy amplios. Sin embargo, otros sí. Pensemos en la demografía, es amplio, afecta a la salud, a los mercados emergentes, al desarrollo de la clase media, a la urbanización, a asuntos medioambientales, por lo que puedes invertir en diversos sectores. Una temática debe estar basada en una serie de drivers que vayan a afectar positivamente a diversas compañías y si escoges bien el tema, es una idea de inversión que debe seguir siendo relevante durante varios años. Si el tema está bien elegido debes poder atravesar diversos ciclos de mercados, puedes tener malos momentos, pero al final el tema subyacente dará retornos. Las buenas temáticas siempre terminan volviendo. Es fácil encontrar ideas, pero no universos de inversión suficientes, con distintas compañías que permitan una diversificación suficiente de las carteras. Yo diría que a día de hoy nuestra inversión temática más popular es la robótica porque tiene muchos aspectos, realidad virtual, inteligencia artificial, ciberseguridad, robots industriales, robots de servicios…y también hay suficientes compañías”, apunta Van den Eynde.

Construcción de las carteras

Ahora bien, si hay temas con diversos aspectos surge la cuestión de cómo se construye una cartera. “Nuestras carteras son el resultado de un proceso de selección bottom up de las compañías, no asignamos un peso fijo a ciertos aspectos de la temática, sino que tenemos en cuenta el universo y analizamos que compañías tienen un mayor recorrido y cuáles tienen unas perspectivas más convincentes. Ahora bien, luego tenemos que revisar si nuestra cartera está suficientemente diversificada. No podemos terminar con un 70% de la cartera en compañías japonesas de automatización de industrias”, explica el gestor. “En cuanto al número de compañías, depende del tema. En Robótica tenemos un máximo de 50, y normalmente invertimos en entre 30 y 50. En el de demografía llegamos hasta 70 porque hay más aspectos a considerar. En Biotecnología hay hasta 100 porque es más una inversión sectorial que temática y exige una mayor diversificación”, añade.

En la selección de valores para la inversión temática no es extraño el recurrir a consultores o asesores externos. Van den Eynde señala que en Candriam, “en general nosotros tomamos las decisiones porque tenemos equipos que cuentan con el expertise suficiente y además, a veces, son asuntos muy intuitivos a pesar de su complejidad. El avance de la inteligencia artificial, el envejecimiento de la población, están ahí. Pero en algunos fondos si tenemos un comité de tres profesores expertos con los que nos encontramos un par de veces al año e intercambiamos ideas sobre como está evolucionando la tecnología, qué temas están desarrollándose, cómo están evolucionando determinados aspectos muy técnicos...”

Las temáticas

Sobre los temas de inversión más importantes, el gestor señala que el primero y original es la biotecnología, con un fondo que data del 2000. “Lo bueno es que ahora tenemos mucha experiencia tras 18 años gestionándolo. Es un sector en el que necesitas experiencia. Con un volumen de 2.000 millones de euros es uno de los mayores fondo del mundo. Luego llegó el de demografía (600 millones de euros), y luego el de robótica, que es el resultado de la reconversión de un fondo de tecnología. Es un tema en el que hay mucha interacción entre diversas tecnologías: sensores, mapping software, son muchas cosas, es un poco de mezcla entre el sector industrial y el tecnológico, pero también con un poco del sector de salud, porque la cirugía robótica está creciendo mucho. Y próximamente vamos a lanzar nuevos fondos”, apunta el gestor.

Para evitar el efecto que las modas y las tendencias pueden tener en las valoraciones, para Van den Eynde la clave es “tener universos de inversión lo suficientemente amplios para tener donde escoger y poder tener partes de la temática donde haya mejores valoraciones, pudiéndonos mover entre sub-temáticas. Pero si el universo en su conjunto está caro, haríamos un uso activo de la liquidez, aunque esa situación suele ser excepcional”.

Por último, el gestor subraya la importancia de la integración de factores ESG en todo el proceso de gestión. “Siempre tenemos en cuenta cuál es la opinión del equipo ESG a la hora de considerar una inversión pero además usamos esa información a la hora de calibrar nuestro cálculos y estimaciones financieras, es una información macro adicional muy útil”, concluye.