David Rolley (Loomis Sayles): "Si EE.UU. aísla a México sería un lose-lose"

Elisabeth Colleran y David Rolley (Loomis)
Foto cedida

David Rolley, codirector de renta fija global de Loomis Sayles, gestora filial de Natixis Global AM, y Elisabeth Colleran, gestora experta en renta fija de mercados emergentes de la firma, ofrecen su visión sobre la renta fija en la era Trump.

Para David Rolley es importante señalar que las principales zonas económicas del mundo (EE.UU., Europa, emergentes y Japón) muestran un crecimiento positivo y sus indicadores adelantados anticipan una continuación de esta tendencia para los próximos meses. Esta sincronía hacía tiempo que no se daba. En EE.UU. se espera que la Reserva Federal mantenga su ciclo alcista con entre dos y tres subidas en los próximos doce meses. En opinión de Rolley, el problema en este escenario es que haya un conflicto entre la política monetaria y la política fiscal. Sobre todo si la administración Trump opta por una política fiscal expansiva con más inversiones públicas y recortes de impuestos

Si se implementan algunas medidas como bajar el tipo del impuesto de sociedades pero eliminar las deducciones por pagos de intereses, para muchas compañías será menos interesante emitir deuda. Para los particulares una bajada de los tipos que gravan productos de inversión, sí que podría hacer aumentar el interés por la deuda corporativa, que hoy por hoy no está tan presente en las carteras del inversor particular frente a otros tipos de deuda como la renta fija municipal.  “Esa combinación de efectos por los distintos cambios fiscales hace que sea interesante tomar posiciones en deuda corporativa ya, porque podríamos asistir a una reducción de los diferenciales”, explicó el codirector de renta fija global de Loomis Sayles.

Además, en ausencia de shocks de noticias inesperadas, el dólar debería seguir fuerte, lo que puede beneficiar a otras clases de activos de renta fija como la renta fija emergente corporativa emitida en dólares de corta duración. En esta clase de activo, lo que intenta el equipo de Elisabeth Colleran con el fondo Loomis Sayles Short Term Emerging Markets Bond Fund es “capturar el diferencial y aislarlo de los movimientos de los tipos”. En su opinión, la ventaja de la deuda corporativa emergente es que “se fija más en las circunstancias y características de las compañías que en el sentimiento sobre los mercados como en el caso de la deuda soberana o la renta variable de estos países, por lo que es menos volátil”.

En cuanto a sus apuestas por países, Colleran señala que los perdedores de años pasados debido a la evolución de las materias primas como Brasil, Argentina, Sudáfrica y Rusia están dando señales de mejoría. Otros países resultan interesantes por las reformas que están llevando a cabo en sus políticas fiscales y monetarias. Para la gestora, destacan en esta área Indonesia, India y Colombia. En cuanto a México, el problema actual es que el sentimiento inversor está dominado por la incertidumbre ante la actitud de la administración Trump.

Para su colega David Rolley, “es imposible aislar las economías mexicana y estadounidense, y además sería un loose-loose para ambas economías y cuanto más tiempo se deje deteriorar la relación, peor será”. Rolley apunta a que la actitud de Trump podría ser “una señal para sus votantes, más que algo real” y confía en que otros miembros de su gabinete y el Partido Republicano supongan poco a poco un contrapeso. Pero mientras, estamos en un mundo indudablemente más volátil, así que recomienda apostar por el análisis a fondo del crédito y por las cortas duraciones.