Skandia quiere desarrollar el negocio de wealth management en Colombia

Como muchas empresas a nivel global, Skandia, quien adoptará el nombre de su matriz, ha decidido “desinvertir en algunos países desarrollados y nos estamos focalizando en los emergentes, donde hay oportunidades para crecer”, señaló Ralph Mupita, director de mercados emergentes de Old Mutual.

Dentro de los emergentes, los países latinoamericanos, y entre ellos, Colombia, son una de las prioridades del grupo. Y aunque no descartan salir nuevamente de compras por la región -su última adquisición fue una compañía distribuidora de seguros en Uruguay-, prefieren crecer de forma orgánica. Por ello, durante los siguientes cuatro meses, Skandia reorganizará varias de sus líneas de negocio, las cuales afectarán, sobre todo, a su comisionista de Bolsa en Colombia.

El objetivo es que la firma bursátil ya no sea simplemente una oficina de corresponsalía de Old Mutual, sino que pueda ofrecer alternativas de inversión a sus clientes. Esto incluye abrir la posibilidad de comprar acciones de manera directa y no sólo a través de los distintos fondos que administra la firma. Sin olvidar que se están finiquitando los trámites para concretar el traspaso a Skandia de tres de las carteras colectivas que hasta hace un par de meses administraba InterBolsa SAI. Se trata de una cartera en acciones, un fondo en Brasil y una cartera inmobiliaria. “El tema inmobiliario quedó un poco desatendido y ahí vemos un gran potencial”, explica el presidente de Skandia Colombia, David Buenfil.

Asimismo, señaló que otra de las apuestas para los próximos meses será que la compañía pase a convertirse también en un gestora patrimonial. Segmento que está orientado a personas de altos ingresos, y que apuntará a los colombianos con patrimonios de entre 100-150 millones en adelante.

Reformas a la vista

A pesar de los cambios que se llevarán a cabo, la principal línea de negocio de Skandia Colombia seguirá siendo el de las pensiones, donde tiene una participación del 32% en el segmento voluntario. Sólo le supera Protección, que a raíz de su fusión con ING logró pasar al primer lugar.

Una de las inquietudes que había surgido para este negocio era la entrada en vigor de la reforma tributaria, la cual eliminó los beneficios a los contribuyentes por hacer aportes voluntarios para la jubilación. Buenfil señaló que aunque se ha visto un efecto, éste “no ha sido tan alto. Hay mucha gente que entiende la necesidad de complementar su pensión para la cual está cotizando en el esquema obligatorio, con otras alternativas así no tengan beneficios tributarios”.

En cuanto a la reforma pensional que prepara el Gobierno, afirma que son buenos todos los esfuerzos que se puedan hacer para mejorar la cobertura. Sin embargo, considera que, frente al problema más grande –la informalidad–, aún no se ven acciones.