La entidad empezó a dar sus servicios en este segmento hace una década, con el objetivo de acompañar a sus clientes, construyendo una metodología y ganando eficiencia operativa.
El fulgurante crecimiento de este tipo de inversiones en los últimos años aún no ha tocado techo. Según explicó este martes Soledad Lecube, responsable de Securities Services en España de BNP Paribas, durante la tercera edición de su evento sobre Capital Privado, "las expectativas indican que hay margen de crecimiento en mercados privados”. Con datos de la entidad, se prevé que este segmento alcance los 20 billones de dólares en 2028, incluso los 24 billones de dólares si el marco macro es favorable.
Con esta premisa, Lecube destacó "el impacto que tienen en la economía real estas compañías, que cada vez tiene más en cuenta criterios de sostenibilidad e impacto en su actividad". Junto con la tecnología, las mencionadas crecimiento, sostenibilidad y tecnología, conforman los tres pilares del plan estratégico del banco y, según manifestó, “son factores de éxito en el desarrollo del capital privado”.
Este año, BNP Paribas España celebra los 10 años desde empezó a dar servicios en capital privado, al hilo de la transposición de la directiva AIFMD. “Hemos crecido con vosotros y hemos aportado nuestro granito de arena al sector; ampliando nuestros servicios, construyendo una metodología y ganando eficiencia operativa”, aseguró. Su intención es continuar por el mismo camino. “No queremos pararnos aquí, como su custodio global y depositario en Europa y España queremos seguir contribuyendo a la industria en la cadena de valor operativo, excelencia técnica y competitividad”, añadió.
Al final, esto se traduce en construir soluciones cumpliendo con altos estándares de calidad, que aporten valor añadido al cliente, mejoren la eficiencia en los procesos y den capacidad a las organizaciones. “El objetivo es el de reducir riesgos, mejorar los controles y alinearnos con las exigencias cada vez mayores del supervisor”, avisó Lecube. ¿Cómo lo hacen? Robusteciendo la plataforma así como ofreciendo reporting regulatorio y fiscal. Y todo con una mayor digitalización y automatización de los procesos.
Visión macro positiva
El entorno de mercado en el que se dibujan estas expectativas fue descrito por Marcelo Carvhalo, Global Head of Economics en BNP Paribas, a través de tres variables: crecimiento, inflación y política monetaria.
Mientras el crecimiento económico global se mantiene más resistente de lo esperado, particularmente en EE.UU., la inflación sigue siendo “pegajosa”, especialmente por el componente subyacente (core) que excluye los componentes más volátiles como los precios de la energía y los alimentos. La persistencia de la inflación es más evidente en EE.UU., donde la Fed tiene que recorrer aún “la última milla” antes de adoptar una postura dovish. Este escenario tiene su reflejo en la dispersión de las políticas monetarias en los principales bancos centrales y, “por primera vez, el BCE se mueve antes que la Fed”, señala Carvhallo. No será un salto al vacío, los movimientos de ambos organismos serán cautelosos y muy dependientes de los datos que se vayan conociendo en los próximos meses.
Con este escenario global, tres de las principales gestoras de private equity en España, Portobello Capital, ProA Capital y GED, ofrecieron su visión sobre industria donde la actividad corporativa ha seguido contenida en la primera mitad del año. “Ha sido un primer semestre lento, cuesta aún cerrar operaciones”, señala José Luis Ramírez, socio-fundador de Portobello Capital. Sin embargo, “nos hemos acostumbrado a vivir peligrosamente”, añade.
Uno de los principales problemas que hay en este momento, es el persistente gap de expectativas del precio de las compañías entre vendedores y compradores. La última milla necesaria para reactivar las operaciones corporativas. “El mercado está en un momento de cautela. No se está reconociendo el valor de las compañías y la sostenibilidad de los márgenes”, explica Rafael López, socio de GED Capital. En este sentido, según los panelistas, se está tardando más de lo que se esperaba a cierre de 2023. “Es un mercado de compradores”, señala López, “pero no hay muchas compañías que comprar”, añade.
Un entorno estable
La lectura, sin embargo, es constructiva. “El entorno se está estabilizando frente a los dos últimos años”, explica David Fuss, director de Inversiones de ProA Capital. “Las bolsas han recuperado y esto ayuda a mejorar la liquidez de los LPs”. En su opinión, “faltan compañías que se animen a salir al mercado”.
Ramírez reivindica el mercado local y estima que este año “en los países del sur de Europa las cosas van a estar mejor que en el norte”, debido a factores como el nearshoring, el abaratamiento de los precios de la energía o el impulso del turismo; esto se traslada en un mayor crecimiento económico con una presión salarial contenida. “Los inversores extranjeros lo perciben. Estamos viendo interés desde EE.UU., que hasta ahora parecía que solo existían los nórdicos”, señala Ramírez. “España es un paraíso para el capital privado”.
Uno de los puntos críticos a los que se enfrentan las casas de private equity con las salidas o desinversiones de las empresas en cartera. “Los resultados de las empresas están siendo buenos, pero no se está reconociendo el valor”, señala López. Algunas de las fórmulas existentes en el mercado para agilizar las salidas van desde la articulación de procesos dirigidos, operaciones bilaterales, hasta la estructuración de vehículos de continuación o el NAV lending. En este contexto Ramírez advierte que “no hay que tener presión para desinvertir, hay que hacerlo cuando toque y maximizando el precio”.
Apetito por otros activos
Más allá del private equity nacional, el apetito por los mercados privados se extiende a otras categorías como deuda privada, las infraestructuras (especialmente aquellas vinculadas a la transición energética, la descarbonización de la economía y la operativa nearshoring) o los fondos secundarios. Así lo explica Laurent Durdilly, Global Head of Private Capital de BNP Paribas. Durdilly participó en un segundo panel acompañado en un segundo panel de Ricardo Gómez, director de Operaciones de Arcano Partners y Marta García, responsable Inversiones Alternativas en Renta 4. Pusieron sobre la mesa la ralentización de la demanda por parte de los inversores institucionales en el último año y medio, sin embargo, esperan que 2024 sea “un buen año en términos de fundraising”, especialmente por parte del segmento de inversores particulares, apunta Gómez.
Aunque sobre el papel hay una variedad de productos para dar acceso a los mercados privados, en la práctica hay importantes limitaciones. Es el caso de la deuda privada: “en España no tenemos un buen vehículo para invertir en el activo”, señala García. Además, la directora de Inversiones Alternativas de Renta 4, lamenta que el acceso a cualquier vehículo sigue siendo muy manual. “Afortunadamente, todo el mundo en la industria está trabajando en la automatización del proceso”, añade.
Necesidad de externalizar la operativa
En una industria que avanza y se transforma en tiempo real, los expertos destacan la necesidad de externalizar la operativa para que, tanto gestoras como distribuidoras, puedan destinar todos sus recursos al core de su actividad. Esta necesidad se agudiza a medida que los LPs se vuelven más globales y más exigentes en términos de información, reporting y eficiencia operacional. “La estructuración y operativa interna se vuelve más compleja y costosa”, apunta Durdilly. Adaptarse al dinamismo de la industria exige una constante inversión en tecnología, talento y capacidad.
Álvaro Camuñas, Head of Client Development y Miembro del Comité Ejecutivo de BNP Paribas, espera que la actividad en mercados privados aumente en niveles de doble dígito en los próximos años. Si España es el paraíso para el private equity, “el capital privado es el paraíso para BNP Paribas”, añade Camuñas.