El mercado ha rotado hacia nichos cíclicos para capturar la recuperación económica y la inflación. Pero el giro ha sido tan rápido que las valoraciones de estos sectores rozan máximos históricos. ¿Es momento de mirar hacia otro lado?
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En los últimos 12 meses hemos visto dos estrategias claras en el mercado. Con el confinamiento global, una apuesta por sectores defensivos y de crecimiento para resistir la crisis. Ahora, con la llamada normalización, una rotación hacia cíclicos y llamados value, los más expuestos a ganar con la recuperación económica y la subida de la inflación.
Lo vemos con claridad en el mercado americano. Los rendimientos del S&P 500 han estado liderados por sectores cíclicos de menor calidad, mientras que los sectores de calidad como el cuidado de la salud se han rezagado significativamente.
Fuente: Bloomberg via Scharf Investments
El problema, como expone Eric Lynch, director en Scharf Investments, la rotación ha sido tan rápida que incluso los nombres conocidos de valor cíclico y profundo cotizan ahora a múltiplos precio/beneficio históricamente altos.
Fuente: Bloomberg via Scharf Investments
En los últimos meses se ha hablado principalmente de una estrategia barbell (barra con pesas). A un lado la tecnología / crecimiento y a otro los cíclicos. Casi ha sido una opción binaria para los inversores. “Si uno no funcionaba en un momento, ¿seguramente el otro si? Hasta ahora, todo iba bien, ¡pero ambos extremos de la barra están claramente sobrevalorados!”, afirma Lynch.
Para el experto, es momento de volver a mirar a los fundamentales. Es decir, crecimiento de beneficios, dividendos y tipos de interés. Y en su opinión, ese ejercicio llevaría a ver más atractivo en acciones en el centro de esa estrategia barbell. En valores aburridos de calidad.
Pone como ejemplo el sector sanitario rezagado. “Es el único que cotiza en un nivel histórico atractivo de P/E. Presenta una gran cantidad de oportunidades aburridas para ganar dinero”, defiende. “Si bien su historia puede no ser tan llamativa como la de los vehículos eléctricos, es probable que produzca un crecimiento constante de las ganancias en los próximos años, y la valoración atractiva debería significar excelentes rendimientos para el inversor paciente”, argumenta.
Curiosamente, ahora son las acciones de calidad las que cotizan con descuento frente a las acciones basura de menor calidad o más especulativas. “Podría decirse que las ganancias están más desconectadas de los precios que durante la burbuja tecnológica”, afirma Lynch.
El experto no descarta una regresión a la media. Pero la pregunta es cuándo. Y como bien saben los seguidores del value, esperar a una rotación puede ser cuestión de bastante tiempo.
A lo largo de la historia, después de un colapso del mercado (como la caída inducida por la pandemia en marzo pasado), los activos basura o con riesgo generalmente corren durante 12 a 18 meses. O hasta que la tasa de crecimiento de la recuperación alcanza su punto máximo. En ese punto, un mercado de valores con visión de futuro generalmente rota de basura a calidad: acciones con márgenes más altos, mejores balances y flujos de efectivo más consistentes.
El actual rally de riesgo tiene casi un año, calcula Lynch. Los comparables año tras año más fáciles están ocurriendo ahora mismo dado el cierre global de la primavera pasada. El índice de fabricación ISM ha sido históricamente un indicador coincidente de la rotación de la basura a las acciones defensivas o de calidad. Desde 2000, cuando el índice ISM alcanza su punto máximo, los cíclicos superaron el rendimiento frente a los defensivos. “Es probable que el nivel actual de fabricación de ISM esté cerca del pico máximo”, vaticina el experto. Si es así, abogaría por mirar ahora hacia acciones de calidad, por muy aburridas que sean.