El fondo T. Rowe Price Global High Yield Bond invierte de forma discrecional en bonos corporativos de emisores de todo el mundo con calificación BB+ o inferior. La selección de los instrumentos se basa en un análisis propio de fundamentales y valor relativo. El objetivo del equipo de inversión es la creación de valor, y lo hacen, principalmente, mediante la selección de títulos y la asignación sectorial. El proceso de inversión hace hincapié en las prácticas de gestión del riesgo y en la diversificación de la cartera. El fondo puede utilizar derivados con fines de cobertura, para una gestión eficiente de la cartera y para beneficiarse de las caídas de las cotizaciones de los instrumentos financieros.
El fondo de T. Rowe Price se creó en 2001 y está gestionado desde la fecha por Mark Vaselkiv.