Un polémico proyecto anunciado por el gobierno de Colombia tiene a la población dividida. Se trata de una iniciativa que busca congelar, en una cuenta especial, el 50% de las cesantías de los trabajadores de manera que opere como seguro de desempleo.
Las cesantías son prestaciones sociales que contempla la legislación colombiana. Éstas buscan proteger al trabajador que queda cesante proporcionándole recursos que le permitan sobrevivir mientras consigue otro empleo.
La iniciativa impulsada por el Gobierno no cayó bien entre los constructores ya que, al redireccionar la mitad de las cesantías de cada trabajador, éste no podría retirar esa porción para compra o mejoramiento de vivienda ni educación, como sucede en la actualidad.
En declaraciones a medios colombianos el viceministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, se mostró en desacuerdo porque “significaría que las personas tendrían que ahorrar más para adquirirla (vivienda) y, en consecuencia, dejarían de lado la compra”.
Al respecto, el viceministro de Empleo y Pensiones, Mauricio Olivera, explicó a la prensa colombiana que, si un trabajador ya tiene comprometidas sus cesantías a largo plazo para deuda hipotecaria, el sistema de subsidio al desempleo no altera ese compromiso financiero. “Si ya las comprometieron, en el momento en que entre en vigencia la norma pueden seguir cumpliendo los pagos. Lo importante es que es una cuenta individual que permitirá identificar la situación de las cesantías y eso se respetará”, sostuvo Olivera.