Una oportunidad clara en renta variable europea

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Foto cedida

Bernhard Langer, director de Inversiones y responsable de renta variable global cuantitativa de Invesco, afirma que “los mercados de renta variable europea están baratos según cualquier modelo que uses. La renta variable se mueve por temor y esperanza y la visión del mercado muchas veces es excesiva. Aunque el euro colapsara, algo que no contemplamos, no sería el fin del mundo. Los mercados a veces reaccionan como si todo se fuera a acabar”.

Langer asegura que las compañías están en muy buena situación, con mucha liquidez,  balances sólidos y con estrategias conservadoras. “La gente está invirtiendo en inmuebles como si no hubiera mañana. Y a todo el mundo le gustan los emergentes. Dicen que la renta variable europea es arriesgada y los emergentes no lo son. A mí me parece que no es así”, dice. El equipo global de renta variable cuantitativa que dirige Langer gestiona un patrimonio de 20.000 millones de dólares.

“La asignación a renta variable está muy baja y en algún momento el apetito volverá”, agrega Carsten Majer, responsable de marketing de Invesco en Europa Continental.

Austeridad o no austeridad

Langer afirma que la única manera de arreglar la crisis es con más Europa y con un control fiscal y financiero centralizado. “Hay muchos cambios estructurales que hay que realizar y en Europa todo esto toma tiempo. Pero hay muchos valores europeos que compartimos y unos líderes políticos que tienen capacidad de reforzar el modelo europeo. O tenemos una Europa más unida o sólo tendremos una organización de cooperación económica. Sería triste dar pasos atrás. No se trata de que una Cumbre de jefes de Estado dé la solución. De allí puede salir una idea pero luego tiene que ser desarrollada”, destaca.

Langer comenta que, como alemán en una empresa estadounidense, en muchas ocasiones le toca hacer de traductor. “Me toca explicar a los americanos qué pasa en Europa y a las autoridades alemanas qué quieren los estadounidenses. Hay mucha divergencia entre la escuela de pensamiento anglosajona y la de Europa Central y del Norte. Desde la óptica anglosajona, nadie entiende por qué el BCE no imprime dinero. En el norte de Europa se piensa que hay que asumir una recesión de ajuste normal. Por el lado de la nueva teoría monetaria, se defiende que la rueda de la oferta monetaria gire, tal y como hacen la Fed o el Banco de Inglaterra, que siguen imprimiendo. Y se considera que la austeridad te arroja inevitablemente a una depresión”, resume.

Para Langer, el modelo europeo es capaz de resistir un entorno de bajo crecimiento como el actual. “En un país como EE.UU., para aceptar la distribución de la riqueza que hay, concentrada en un 1% de la población, necesitas tener crecimiento. Si no, es difícil de aceptar y de justificar por el resto de los ciudadanos. En Europa, Alemania está dispuesta a caminar hacia una mayor integración, pero siempre y cuando se ceda soberanía para asegurar la disciplina fiscal”, añade.
Europa es aún un área de crecimiento para el negocio de Invesco.

“Lo más importante para valorar el potencial de un mercado en nuestro negocio es la renta per cápita. En emergentes, la renta crecerá, pero hay tiempo para entrar. En Europa, la renta caerá, pero es un lugar muy interesante para estar. Es la segunda región más importante del mundo”, resume Majer.

“Si ves la CNN o la CNBC, parece que Europa está en guerra civil. Europa es un continente vivo y la gente tiene un problema para la jubilación. Eso no desaparecerá si el euro se rompe. Europa no se volverá el Tercer Mundo si el euro colapsa. Habría una recesión profunda, pero no sería el fin del mundo”, agrega Langer.

Límites

El responsable de renta variable global cuantitativa de Invesco destaca que la nueva tendencia de gestión orientada a resultados, con límites prefijados de volatilidad, tiene ventajas pero también presenta retos importantes.

“En los últimos años, todos los mandatos que ganamos tienen un objetivo de riesgo prefijado. Si el cliente no está dispuesto a perder más de un 10%, por ejemplo, puedes ver cómo en un solo día se agota todo el presupuesto de riesgo. Primero partes del presupuesto de riesgo y luego ves dónde inviertes. Lo malo de esto es que te puedas convertir en un seguidor de tendencias y que te veas obligado a vender cuando todo el mundo lo hace. Ahora estamos largos en renta variable, pero está todo condicionado por el objetivo de riesgo. La asignación de activos viene después”, explica.

Sobre la posible venta de gestoras europeas, Langer afirma que, aunque muchas entidades quieren vender, la brecha entre el precio de compra y el de venta es muy grande. “Las compras de gestoras son siempre arriesgadas. Nosotros, en nuestros modelos de valoración, penalizamos a las entidades que compran otras gestoras porque suelen tener problemas”, comenta.