La gestora ha lanzado al mercado un nuevo fondo de inversión de renta fija global denominado Cuásar Optimal Yield. El fondo combina la inversión en bonos gubernamentales de alta calidad crediticia y en bonos high yield en una proporción que está determinada por el diferencial de rentabilidad que oscila entre ambos activos según el momento del ciclo del mercado.
Esta estrategia basada en la variación del spread de crédito hace que el fondo sirva "para cualquier momento de mercado", asegura Jacobo Zarco, socio-director de atl Capital. “Es un fondo flexible que varía su exposición entre ambos activos complementarios según el escenario del mercado. De este modo, permite aprovechar los momentos de bonanzas aumentando la exposición en high yield y por el contrario, actuará como refugio con mayor peso en bonos de gobierno, que coincidirá con los momentos de mayor volatilidad del mercado, ofreciendo tranquilidad al inversor”
El rango de exposición de Cuásar Optimal Yield a bonos soberanos y de alto rendimiento irá oscilando para alcanzar el equilibrio, en función del nivel del diferencial de crédito.
Gestión
El equipo de gestión define al nuevo producto como un fondo sistemático, equilibrado, consistente, conservador y flexible. Felix López, socio director de la gestora, afirma que la estrategia complementaria que se aplica en el fondo se adapta a todo tipo de inversor, desde conservador a agresivo dependiendo del momento de mercado.
El Cuásar Optimal Yield se engloba en la gama de fondos de atl Capital que aplica una estrategia de inversión más concreta que la implementada en los fondos core de la firma. Una gama a la que también pertenece el Cosmos Equity Trends, un producto que invierte en megatendencias. La inteligencia artificial y robotización de sistemas, ciberseguridad, digitalización, el envejecimiento de la población o la sostenibilidad, son algunos de los sectores en los que invierte este fondo como oportunidad en la nueva economía.
Con este lanzamiento, la firma busca "adaptar las mejores alternativas de inversión a la demanda de los inversores", explican, en un escenario con tipos de interés bajos y escaso crecimiento que ofrece pocas oportunidades para que un inversor conservador alcance expectativas de rentabilidad positivas.
