Bankinter aspira a ser la tercera banca privada en España y a aumentar su beneficio en un 40% en tres años

Joaquin Calvo Sotelo Bankinter
Joaquin Calvo Sotelo Firma: Bankinter (Cedida)

Después de unir bajo la unidad de banca patrimonial a todo su negocio de banca privada, red de agentes y su filial en Luxemburgo, Bankinter presenta las líneas estratégicas de su negocio de altos patrimonios para los próximos tres años.

De la mano de Joaquín Calvo-Sotelo, máximo responsable de esta unidad, el grupo se marca los siguientes objetivos numéricos: incrementar un 40% en beneficio antes de impuestos (en 2020 podrían cerrar con un beneficio de entre los 124 y 130 millones), crecer un 20% en activos bajo gestión y aumentar un 40% el peso en inversión de sus clientes.

La entidad, a punto de alcanzar los 50.000 millones en banca privada (un 80% en recursos fuera de balance) y con un margen bruto de 200 millones, reconoce que cuentan con una cuota de negocio muy superior a la que les corresponde por el tamaño que tiene el banco. “Esta cuota muestra que la banca privada ha sido y es un negocio estratégico”, determina Calvo-Sotelo, quien destaca que son el banco que mas ha crecido en los últimos cinco años de forma totalmente orgánica.

Actualmente, según el Ranking de Banca Privada de FundsPeople, Bankinter es la cuarta entidad a nivel nacional, por detrás de Santander, CaixaBank y BBVA. Aunque son conscientes de la dificultad de convertirse en la primera banca privada por patrimonio, no descartan subir al tercer puesto, tal y como admite Calvo-Sotelo. “La segunda nos queda mas lejos, pero vamos a intentarlo, con el paso del tiempo todo se andará”, pronostica el director de Banca Patrimonial.

Sin embargo, su objetivo no es cuantitativo, sino cualitativo. "Queremos ser la referencia de la banca privada española. Es prácticamente imposible ser los primeros por patrimonio, pero nos gustaría que cuando un cliente piense en banca privada piense en Bankinter”, reflexiona. “Tenemos todos los mimbres para ser los mejores”, añade.

Desde su punto de vista, son el único banco que cubre todas las necesidades del cliente. “Ofrecemos un servicio integral. Hoy en día la única manera de diferenciarte es por el servicio”, puntualiza.

Big data

En este sentido, el uso del big data va a permitir a Bankinter trabajar en una nueva categorización de los clientes de banca privada en base a sus necesidades y no solo por el patrimonio que atesoren. “Vamos a dar servicio ad-hoc en función de sus necesidades e intereses”, señala. En este contexto de tipos bajos, de mucha liquidez y volatilidad, con una amplia oferta de productos y varias operaciones corporativas, considera que todo pone de manifiesto el valor de la figura del banquero privado.

Actualmente, a los servicios de banca privada acceden los clientes por encima del millón de euros. Calvo-Sotelo destaca que trabajan con total transparencia en costes, ofrecen coinversiones en activos reales e integran a los activos inmobiliarios en las carteras de los clientes. A nivel general, quieren apostar decididamente por la planificación patrimonial. “Tenemos que dar un paso mas y ser los profesores de nuestros clientes”, afirma.

Respecto a la ASG, desde Bankinter Banca Privada cada vez lo ven como menos diferencial porque está totalmente integrado en su ADN. “Estamos tremendamente comprometidos”, subraya.

Con más de 49.000 millones repartidos en más de 48.000 clientes, el banco ha crecido un 14,5% en patrimonio respecto al cierre de 2020. Para la atención y asesoramiento de estos clientes, la entidad dispone de un total de 46 centros especializados repartidos por toda la geografía nacional, en los que desarrolla su actividad una plantilla de 207 banqueros privados, a lo que se añade una red de 356 agentes financieros, focalizados en este negocio.