Agnes Belaisch, responsable del equipo de estrategia de deuda emergente de Threadneedle
Threadneedle ha creado en los últimos años un sólido equipo de especialistas en deuda emergentes, que gestionan fondos con fuertes convicciones, centrados en las tendencias macroeconómicas y con un gran conocimiento de los países y regiones. Agnes Belaisch, es la responsable del equipo de estrategia de deuda emergente y es una profunda conocedora de la realidad de estos países ya que ha vivido tanto en Europa emergente, como en India y Latinoamérica cuando trabajaba para el Fondo Monetario Internacional antes de incorporarse a la gestora británica.
“Es importante conocer las intenciones de los gobiernos, sus características y peculiaridades si quieres invertir en ellos, porque ahora los mercados están muy perdidos. No entienden los distintos países ni el significado real de ciertas decisiones o movimientos políticos”, dice Belaisch. “Con los emergentes hay muchos conceptos erróneos y sobre todo hay miedo, pero no existen problemas reales”. Ese miedo es, en su opinión, la causa de que este activo vea constantemente entradas y salidas de dinero, ya que la gente se deja llevar por los sentimientos y las noticias puntuales, sin tener una convicción sólida sobre esas economías.
Belaisch está convencida que la recuperación de los emergentes se debe a factores internos ya que no se están apalancando en las exportaciones a los mercados desarrollados, tal como sucedía antes. “Su fortaleza va a ser sólida porque por un lado han aumentado las exportaciones entre ellos mismos , con China como primer receptor de materias primas y, por otro, porque se han dado cuenta de que se necesitan entre ellos por lo que están creando una integración financiera al invertir unos en otros, lo que les está haciendo ser resistentes por ellos mismos”, dice. “Se debe creer en la historia fundamental de los mercados emergentes si estás en ella para el largo plazo”.
Además, la experta de Threadneedle está convencida de las ventajas de jugar la apuesta emergente a través de deuda mejor que de acciones. “En la renta variable hay que saber elegir pero en los bonos, la historia es una y es buena en todos los emergentes”.
La gama de Threadneedle se compone por un fondo en dólares (el Threadneedle Emerging Market Hard Currency Bond Fund que con datos hasta abril había obtenido un 24% a un año), otro en moneda local (Threadneedle Emerging Market Local Fund), otro en deuda corporativa (Threadneedle Emerging Market Corporate Bond Fund) y un hedge fund. Este último es el EM Currencies Crescendo, que en lo que va de año lleva una rentabilidad del 11,3% y que, en breve, estará disponible en una versión UCITS III.