Al igual que pasa con los depósitos bancarios -el producto más presente en las carteras de los ahorradores nacionales- el asesor de la oficina del banco aún se mantiene en primera fila del imaginario colectivo de los españoles cuando tienen que preguntar dónde colocar su dinero, por delante del asesor financiero independiente. Según el III Barómetro del Ahorro del Observatorio Inverco 2013, mientras que un 54% de los ahorradores españoles opta por ser asesorado en su oficina bancaria, un 41% prefiere hacerlo fuera, es decir, a través de un asesor financiero independiente.
Desde 2011, cuando el asesoramiento financiero independiente ocupaba el cuarto lugar en el ranking de fuentes de información utilizadas por los españoles, este asesoramiento externo a la red bancaria ha escalado posiciones. En concreto, hasta la segunda.
Eso sí, el peso de las fuentes de información utilizadas también se ha dispersado. Por ejemplo, a pesar de que el asesor bancario y el asesor financiero son las dos principales, su peso en 2011 era del 76% en el primer caso y del 45% en el segundo y hoy, dos años más tarde, del 54% y del 41%, respectivamente.
“Por suerte, el asesoramiento ha mejorado más en este país de lo que el ahorrador es consciente”, recuerda Gonzalo Rengifo, miembro del Observatorio Inverco.
El resto de fuentes de información utilizadas por los ahorradores españoles son los foros y redes sociales (29%), los amigos y familiares (27%), las páginas web de entidades financieras (26%) y, finalmente, los medios de comunicación (18%).
Pero, ¿qué valoran los ahorradores de los fondos de inversión y los planes de pensiones?
Pues, básicamente, cualidades como la rentabilidad, la liquidez y la fiscalidad en los fondos de inversión y, por otro lado, la fiscalidad y la confianza en los planes de pensiones.
En estos segundos, un criterio como la rentabilidad, primordial en el caso de los fondos, se sitúa por valoración como el quinto atributo en importancia.