La acción de supervisión conjunta servirá también para que ESMA recopile información sobre posibles prácticas de greenwashing observadas en las comunicaciones de marketing y la publicidad.
La Autoridad Europea de Valores y Mercados ha puesto un marcha una acción común de supervisión (ACS) para vigilar la aplicación de las normas de divulgación de MiFID II con respecto a las comunicaciones publicitarias en toda la Unión Europea. Esta valoración, que se realizará de la mano de las autoridades nacionales competentes, se llevará a cabo a lo largo de 2023.
“ESMA es consciente del papel fundamental que las comunicaciones publicitarias y los anuncios pueden desempeñar a la hora de determinar el comportamiento de los consumidores e influir en las decisiones de inversión”, explican en el comunicado. Por eso han puesto en marcha este ejercicio para evaluar la aplicación por parte de las empresas de inversión y las entidades de crédito de los requisitos de MiFID II en materia de comunicaciones publicitarias.
En concreto, las autoridades nacionales examinarán si las comunicaciones publicitarias (incluida la publicidad) son imparciales, claras y no engañosas. También se pondrá el foco en cómo seleccionan las empresas el público destinatario de las comunicaciones publicitarias, especialmente en el caso de los productos de inversión más arriesgados y complejos.
Interés por los inversores más jóvenes y el greenwashing
ESMA también es consciente de que los inversores más jóvenes y menos experimentados son especialmente vulnerables cuando operan en línea. Por esta razón, esta CSA considerará de cerca la comercialización y la publicidad de las empresas a través de canales de distribución que incluyen aplicaciones, sitios web, redes sociales y colaboraciones con afiliados como influencers.
Por último, esta acción de supervisión es una oportunidad para que ESMA recopile información sobre posibles prácticas de greenwashing (ecoblanqueamiento) observadas en las comunicaciones de marketing y la publicidad.
