Las recomendaciones de inversión de los principales actores del sector de la gestión de activos están proliferando a través de los canales sociales. Por este motivo, La Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA, por sus siglas en inglés) se ha preguntado qué nivel de conocimiento tienen los inversores minoristas y cuáles son los principales riesgos a los que pueden enfrentarse. Subraya que las recomendaciones de inversión deben elaborarse y difundirse de forma objetiva y transparente para que los inversores puedan distinguir entre hechos y opiniones antes de tomar cualquier decisión de inversión. También es crucial que los inversores puedan identificar fácilmente la fuente de información y los posibles conflictos de intereses de quienes hacen las recomendaciones, quién las hace y en qué calidad.
"En tiempos en que las plataformas de medios sociales son una fuente de información clave para los inversores minoristas, creo que es importante que sean conscientes de la información que reciben. En una época en la que las plataformas de medios sociales son una fuente de información clave para los inversores minoristas, creo que es importante que sean conscientes de los riesgos asociados a confiar en las recomendaciones de los medios sociales a la hora de tomar decisiones", explicó Anneli Tuominen, presidente en funciones de ESMA, concluyendo que: "El objetivo de la declaración es también. recordar a los asesores de inversión en las redes sociales y plataformas similares las normas aplicables y lo que ocurre cuando no se respetan. y lo que ocurre cuando no se respetan.
Desde la CNMV también se han hecho de las recomendaciones de ESMA y han aprovechado para recordar algunos puntos clave, recogidos en el Derecho de la UE sobre qué es una recomendación de inversión así como otros puntos clave que se recogen a continuación.
¿Qué es una recomendación de inversión?
El Derecho de la UE define una recomendación de inversión como información en la que se recomienda o sugiere una estrategia de inversión, explícita o implícitamente, relativa a uno o varios instrumentos financieros o a emisores, incluida cualquier opinión sobre el valor o el precio presente o futuro de dichos instrumentos, destinada a los canales de distribución o al público. Los canales de difusión pueden ser informes de analistas, artículos, medios de comunicacióntradicionales o incluso redes sociales.
¿Quién debe leer esta declaración?
Cualquier persona que recomiende inversiones de cualquier forma a través de cualquier medio o plataforma y cualquier persona que tome decisiones de inversión sobre la base de las recomendaciones de inversión realizadas en cualquier medio o plataforma. Esto incluye las redes sociales.
¿Cuál es el posible problema?
La posibilidad de inducir a error a los inversores. Las recomendaciones de inversión deben hacerse de una manera específica y transparente, de modo que los inversores, antes de tomar cualquier decisión de inversión, puedan conocer y evaluar:
- La credibilidad de la recomendación y su objetividad; y
- Los intereses de quienes formulen las recomendaciones. De este modo, todo el mundo tiene libertad para expresar su opinión sin perjudicar a los demás en el proceso.
¿Quién elabora recomendaciones de inversión?
Normalmente, empresas como bancos e intermediarios financieros, pero también analistas financieros. Sin embargo, cualquier otra persona que proponga una estrategia de inversión puede entrar dentro de esta categoría si su recomendación de inversión está destinada a un público más amplio. Esto incluiría la publicación en las redes sociales. Además, si se formulan recomendaciones de inversión con frecuencia, se pretende llegar a un público amplio y esa persona se presenta a sí misma como alguien con experiencia financiera, dicha persona puede ser considerada como un experto. En tal caso, la ley exige que esa persona proporcione información adicional.
¿Dónde están las normas?
Las normas se recogen en el Reglamento sobre abuso del mercado de la UE. Se exige que quienes hagan recomendaciones de inversión revelen sus identidades y presenten recomendaciones de una manera objetiva, así como revelar todas las relaciones o circunstancias que pudieran afectar a su objetividad. En el caso de los expertos, deben seguirse normas adicionales.
¿Qué ocurre si no se respetan las normas?
Los reguladores de la UE vigilan activamente la conducta, las órdenes y las transacciones de los inversores en el mercado. Si hay motivos para hacerlo, investigan. Si no se respetan las normas relativas a las recomendaciones de inversión, pueden imponerse multas u otras medidas de supervisión, que pueden incluir la remisión del caso a la Fiscalía.
