Criterios ASG, ¿por qué son una oportunidad de inversión?

Criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ASG, en sus siglas en castellano) aunque de sobra conocido también sus siglas en inglés, ESG. Estos factores se han convertido en la piedra angular de la industria de la gestión de activos. Definimos en qué consiste estos criterios y por qué se ha convertido en una atractiva oportunidad de inversión.

La sostenibilidad está en el centro del todo y cada vez quedan menos voces disonantes que niegan que no caminar en este sentido traerá consecuencias para nuestro entorno y para la sociedad. Es en este momento cuando los criterios ASG entran en acción. Son factores ambientales, sociales y de gobernanza que ayudan a tomar decisiones de inversión.  

El factor A se refiere a decisiones que tienen en cuenta el cambio climático, la biodiversidad y los recursos naturales, la gestión de los residuos, entre otros. Si bien es el más extendido, cada vez más escuchamos acciones encaminadas en la consecución de los siguientes factores.

El factor S tiene en cuenta todo aquello que tiene relación con los diferentes grupos de interés con los que se relaciona una organización. Los criterios S abarcan los derechos humanos, los derechos laborales y las condiciones de trabajo, la salud y la seguridad en el trabajo, la igualdad de oportunidades, entre otros.

Y, por último, el factor G. Este criterio involucra cuestiones como la transparencia, el equilibrio y la información en el entorno de una organización.

Ahora bien, ¿por qué invertir bajo criterios ASG? J.P. Morgan AM señala siete datos que te dan las razones para ello. Los resumimos.

El primero de todos es que los criterios ASG influyen en las preferencias de los consumidores y las actitudes de la sociedad. Cada vez es mayor el grado de concienciación de la sociedad ante un consumo responsable y eso revierte en cómo lo hace. Solo observemos los datos de la encuesta Global Consumer Insights Pulse 2021 de PwC en la que participaron más de 8.600 consumidores de 22 regiones. La mayoría afirmaba consumir en empresas decididas a proteger el medio ambiente (ver gráfico). También, uno de los datos que se desprende del Estudio Global de Inversión de Schroders, muestra que el inversor como ciudadano ha aumentado el grado de responsabilidad que asume en este sentido hasta alcanzar un 70%.

“Hago mis compras en empresas decididas a proteger el medioambiente”
Fuente: J.P. Morgan Asset Management, PwC

Este cambio en la sociedad tiene también su reflejo en las instituciones y a nivel macroeconómico. Según el Estudio Global de Inversión de Schroders, el 73% de los inversores españoles considera que el gobierno nacional y los reguladores deberían ser los principales responsables de llevar a cabo iniciativas orientadas a mitigar el cambio climático. La reciente COP26, celebrada en Glasgow, evidencia que el camino tiene que ir en pro de la sostenibilidad, aunque falta ver hechos.

Los Gobiernos de los países que emiten más gases de efecto invernadero (GEI) están sentando las bases de un futuro neutral en carbono, con pocas emisiones o ninguna.  Para lograrlo las fuentes de energía tradicionales deben representar un porcentaje mucho menor de la combinación energética global (Ver gráfico). Así, este entorno pone en aprietos a algunos sectores… El cambio hacia las energías renovables puede resultar complejo para los sectores basados en los combustibles fósiles.

Fuente: J.P. Morgan Asset Management, BP Energy Outlook 2020. La previsión se basa en la hipótesis de BP respecto de la neutralidad en carbono para 2050. Datos a fecha de 30 de junio de 2021.

No obstante, estos factores también pueden traer oportunidades de inversión para otros…La transición energética está nutriéndose de miles de millones de dólares. Según datos extraídos de Bloomberg y Eurostat, la inversión global en la transición energética en 2020 registró en el sector de las renovables 304.000 millones de dólares; y en sectores como almacenamiento, electrificación, captura de carbono y otras: 197.000 millones de dólares.

Como comentábamos al principio del artículo, los factores ASG no solo son ambientales. Los factores sociales y de gobernanza también están creciendo. El reciente pico de referencia en temas sociales en medios corporativos indica el mayor interés y la presión normativa.

Número de referencias a empresas en el MSCI ACWI, media móvil de 4 meses
Fuente: J.P. Morgan Asset Management, MSCI. Datos a 30 de junio de 2021

Y todo ello tiene su reflejo en la inversión, que no solo se limita a la renta variable, cada vez se concede más financiación a proyectos ambientales y sociales. La demanda de estrategias de renta fija sostenible también crece a gran velocidad. Solo hay que echar un vistazo a las emisiones de bonos sostenibles, que se han duplicado en 2020. Del mismo modo, tampoco se limita a la gestión activa. La gestión indexada desempeñará un papel clave en la transición hacia una adopción generalizada de la inversión ASG.

Emisión de bonos verdes, sociales y sostenibles
Fuente: J.P. Morgan Asset Management, Climate Bonds Initiative. Datos a 30 de junio de 2021

Concluyendo, la tendencia imparable de la sostenibilidad y la inversión bajo criterios ASG se plasma en los flujos de inversión. En 2020 el 48% de los flujos fueron a estrategias sostenibles, solo dos años antes era del 18% (Ver gráfico).

 Cuota de flujos netos totales hacia estrategias sostenibles
Fuente: J.P. Morgan Asset Management, Morningstar. Datos a 30 de junio de 2021