“Aunque esperamos una corrección técnica adicional y un movimiento lateral de los mercados, a medio plazo la política monetaria actual nos hace ser muy optimistas al ser muy favorable para la exposición a renta variable”. Así lo cree Jens Ehrhardt, gestor del DWS Concept DJE Alpha Renten Global, quien considera que probablemente se producirá a lo largo del año un traslado del inversor de la renta fija a la renta variable, por lo que se muestran positivos tras la corrección sufrida por el mercado en las últimas semanas. Existen, además, algunos factores que refuerzan esa visión. “Los indicadores de sentimiento están mejorando”, asegura.
Pero, ¿dónde encontrar las mejores oportunidades de inversión? Ehrhardt cree que los mercados en los que el estímulo monetario aplicado por las autoridades monetarias es mayor tienen más posibilidades de registrar un mejor comportamiento. “Esto significa que las Bolsas de Estados Unidos y Japón batirán al resto de mercados”, afirma. Sin embargo, el experto recuerda que la renta variable asiática cotiza más barata y, además, ofrece atractivas rentabilidades por dividendo. “Esto quiere decir que podemos ver una cierta recuperación en China y Hong Kong”, indica.
Por el contrario, el gestor de Deutsche Asset & Wealth Management considera que Europa podría registrar probablemente una rentabilidad inferior. De la quema se salvaría Alemania, que según el experto podría experimentar una evolución relativamente más favorable gracias a las exportaciones a China y Estados Unidos. “El mayor estímulo para Europa son las exportaciones. La confianza del consumidor en la región todavía sigue deprimida. Excepto en Alemania, el bajo crecimiento de los salarios deprime el gasto del consumidor”, señala. El mismo efecto sobre el consumo estaría teniendo el alto nivel de desempleo en el Viejo Continente.
Para que las expectativas sobre el mercado de renta variable europea mejoren, Ehrhardt entiende importante que el presidente del BCE, Mario Draghi, adopte un plan de flexibilización cuantitativa. “Esto sería posible después de la celebración de las elecciones alemanas. La ventaja es que muchas partes del mercado de renta variable europeo cotizan a niveles más bajos que las de Estados Unidos. No obstante, las perspectivas para la economía en general son mejores en Estados Unidos que en Europa debido a unos tipos de interés más bajos y unos menores costes de la energía que en Europa”, señala el experto.
En cuanto a la renta fija, Ehrhardt afirma que “hay una burbuja en los bonos de los mercados emergentes. El dinero que ha entrado en esta clase de activo a lo largo de los dos últimos años ha sido excesivo. Los tipos de interés es más probable que suban en estos países. También que sus divisas se deprecien”. Al gestor de Deutsche Asset & Wealth Management le gusta la deuda corporativa, incluso aquella que no cuenta con calificación crediticia. “Sin embargo, aquí es importante examinar las empresas a fondo. Evitamos los vencimientos a largo plazo. En general, los mercados de bonos de la mayoría de países están sobrevalorados en comparación con los mercados de renta variable de esos mismos países”, explica el experto.