Ibercaja integra a Ibercaja Patrimonios en su red y se marca un objetivo de volumen de 9.300 millones a dos años

César Villacampa, Ibercaja
Ibercaja

Desde 1998, Ibercaja Patrimonios, filial 100% del grupo Ibercaja, venía desempeñando la línea de negocio de banca privada en sus ocho oficinas en España. Una estructura organizativa que, desde ahora, cambia. Ibercaja acaba de anunciar que potencia su banca privada integrándola en su red bancaria, un paso que viene acompañado de un objetivo ambicioso de duplicar su patrimonio a dos años, hasta los 9.300 millones, y pasar de tener 5.000 a 12.500 clientes.

Parte de este crecimiento, explica la entidad, se conseguirá con la reasignación de los clientes de Ibercaja que cuentan con un ahorro superior a 300.000 euros. El resto provendrá de nuevos clientes de los que más del 80% procederán de Madrid, Levante, Burgos y Cataluña, comunidades donde se han puesto en marcha planes de crecimiento específicos.

Integrar a Ibercaja Patrimonios permitirá, indican, materializar de manera más eficiente las sinergias existentes con las redes gestoras de los segmentos de Banca Personal y Banca de Empresas, así como compartir y aprovechar plenamente el resto de soportes clave para el negocio de la entidad como son la tecnología, la sistemática comercial y la imagen de marca, entre otros.

Además, se incrementará en 40 el número de figuras gestoras para esta línea de negocio, hasta alcanzar 78 a finales de 2018. En este sentido, apuntan que el equipo de profesionales trabajará bajo el modelo comercial de relación global con el cliente: será el único gestor del ahorro del cliente en banca privada y cogestionará con otros gestores de la red para otros productos como la financiación, medios de pago, seguros, etc.

“Mediante el nuevo modelo organizativo, Ibercaja ofrecerá al cliente una propuesta de valor basada en un servicio financiero diferencial de alto valor, con una gestión especializada y personalizada, en una amplia oferta de productos competitivos y en el asesoramiento fiscal”, añaden.

La banca privada constituye uno de los pilares básicos del crecimiento del negocio minorista de Ibercaja. Así, en los planes que se están desarrollando en Madrid, Levante, Burgos y Cataluña, se ha considerado este segmento como uno de los prioritarios para alcanzar los objetivos previstos.

La totalidad de estos planes tiene previsto un incremento en los recursos administrados de los clientes de banca privada superior a 600 millones de euros lo que supone un 8,5% del crecimiento de volumen de actividad estimado hasta 2020 por el banco para estos territorios.

En distintas localidades de estas comunidades ya se han puesto en marcha nuevos centros de banca privada y están previstas más aperturas hasta 2020.