La encuesta que mide el salto generacional entre los inversores millennials y los mayores de 40 años

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Durante años ha prevalecido el tópico de que los jóvenes tienden a tomar decisiones más arriesgadas e innovadoras que sus mayores. También el tópico de que los españoles somos muy conservadores con nuestras inversiones. ¿Y si no fuera esta la realidad? La cuarta edición de la Encuesta Global de Inversión de Legg Mason Global AM se encarga de desmontar estos y otros mitos. Si bien en la primera parte de la encuesta, publicada recientemente en Funds People, se destapaba que los inversores millennials españoles en realidad son conservadores y están más reticentes al uso de nuevas tecnologías que otros millennials europeos (leer más), en esta segunda parte se comparan las tendencias de inversión entre esta generación de inversores (típicamente los nacidos entre 1980 y el 2000) y los inversores mayores de 40 años.

En primer lugar, algunas pinceladas sobre la encuesta: se ha realizado a 5.370 grandes patrimonios de 19 países de todo el mundo entre el 3 de diciembre de 2015 y el 8 de enero de 2016. Los datos españoles, sobre los que se ciñe este artículo, tienen en cuenta a 261 inversores en España de los cuales 60 son millennials y los otros 201, con edades comprendidas entre los 40 y los 75 años. Es la primera vez en los cuatro años de vida de este sondeo que se publican los datos por segmentos de edades.

El primer tópico que rompe la encuesta tiene que ver con el perfil de riesgo, la forma en la que se definen los inversores: un 73% de los inversores más mayores se ha definido como conservador, tan sólo 3 puntos más que los millennials encuestados. Además, el 70% de mayores de 40 años han declarado sentirse más conservadores que el año pasado, frente al 66% de millennials que opinaron en el mismo sentido. Para Javier Mallo, responsable de ventas de Legg Mason para España y Portugal, este ajuste de percepción se puede atribuir a que “sería más correcto hablar no de perfiles, sino de percepciones. No es que seas más conservador, eres igual de conservador pero el repunte de la volatilidad te ha obligado a ajustar tus necesidades”.

El segundo dato llamativo de la encuesta tiene que ver con la asignación de capital. Los millennials españoles asignan el mayor porcentaje de sus inversiones a activos líquidos (22%) e inversiones inmobiliarias (22%). Los inversores mayores de 40 años también asignan la mayor parte de su patrimonio a activos líquidos (27%), pero marcan las distancias con los más jóvenes a tener una asignación a renta variable destacadamente superior, del 27% frente al 18% de los millennials. Además, la generación más joven invierte en mayor proporción que los mayores en activos de renta fija (un 1% más, hasta el 15%), en oro y otros metales preciosos (4% más, hasta el 8%) y en inversiones no tradicionales (un 4% más, hasta el 10%). La encuesta resalta en este punto la impresionante caída de la asignación a renta fija en los últimos dos años entre los inversores entre los 40 y los 75 años: si en 2014 hasta un 23% de la cartera estaba invertida en deuda de forma promedio, ahora es tan sólo un 14%.

El tercer gran apartado de la encuesta se centra en el uso de nuevas tecnologías. El punto más  destacado no es que los millennials estén más dispuestos a usar herramientas online para invertir e informarse (el 23% acude a redes sociales), sino que los inversores españoles de más de 40 años han mostrado un interés superior a la media europea: un 14% emplea redes sociales (principalmente blogs y foros) frente al 8% de la media europea; un 21% utilizan plataformas automáticas de asesoramiento, frente al 13% europeo; además, un 18% emplea dispositivos móviles (6% más que los europeos) y un 16% usa apps especializadas (4% más que la media europea).

“Creemos que la tecnología va a ser el punto clave de cambio para la industria financiera en los próximos años”, declara Mallo al respecto. El responsable considera que “los millennials muestran mucho más sentido común de lo que podría parecer; están preocupados por entender, asumen que el mercado es complicado y buscan toda la tecnología posible y recurren a un asesor para poder invertir”.

El asesoramiento es el último gran tema de la encuesta. De las plataformas a las que asignan más importancia para asesorarse, ambos grupos de edad han puesto en el primer lugar de la lista al asesor financiero profesional (74% de mayores y 82% de millennials). En el caso de los inversores más jóvenes, ha obtenido la misma proporción de confianza las noticias publicadas en medios financieros (frente al 63% de los mayores). Las otras tres fuentes de información a la que se suelen recurrir son la familia, amigos y/o compañeros de trabajo (59% de mayores y 77% de millennials), los foros y blogs (48% de mayores y 60% de millennials) y, de forma interesante, los roboasesores (49% de mayores y 70% de millennials). “La situación actual del mercado y el valor añadido que aporta el asesor se va a traducir en un interés creciente por los servicios de asesoramiento financiero”, concluye Javier Mallo sobre estos datos.