La "justicia" de la tasa de desempleo en USA

¿Por qué? La respuesta más sencilla es un tema asociado a la competitividad. Es imposible tener una industria en un país de mano de obra costosa produciendo un bien estandarizado, compitiendo con un país de mano de obra barata. Así, las industrias de países de mano de obra costosa necesitan especialización en los bienes que producen o dedicarse al sector de los servicios. Para lo cual, de otra parte, muchos países no están preparados.

Durante muchos años la economía norteamericana se sostuvo por el surgimiento en masa de las nuevas tecnologías, las cuales mantuvieron el empleo en números bastante saludables. Famoso es el período 1996 a 1999, cuando la economía estadounidense creció sin sobresaltos, mientras que Asia y Rusia colapsaban, por colocar solo un ejemplo. Incluso, Estados Unidos se dio el lujo de generar superávit primario, lo que muestra lo extraño que era el patrón de la economía en ese momento. ¿Por qué mantuvo la economía a flote las nuevas tecnologías? Básicamente porque permitió el surgimiento de nuevas necesidades y nuevas profesiones, ambas impensadas 20 años atrás. Desde el punto de vista pragmático, si se le hubiera preguntado a un joven de 18 años en 1980 qué iba a estudiar en la universidad, de seguridad que Ingeniería de Sistemas no hubiera estado en las cuentas de muchos.

Sin embargo, el problema mayúsculo de la economía norteamericana es que se dio un boom de nuevas necesidades, pero sin reformar los sectores tradicionales. Quizá se presentó un encubrimiento de las verdaderas debilidades de la economía, por el surgimiento del nuevo sector. Nadie pareció darse cuenta que mientras tanto se estaba generando una generación de norteamericanos sin la suficiente capacitación para afrontar los cambios que imponía el nuevo orden de las cosas. Y muchos norteamericanos ni siquiera se capacitaron. Los que recuerdan, hace algunos años era popular escuchar que en Estados Unidos se podía vivir bien si uno se dedicaba a vender hamburguesas en un restaurante de comida rápida. Eso hoy en día ya no es cierto. Con el agravante de que los procesos educativos estadounidenses se han centrado recientemente en formar profesionales en áreas tradicionales, sin dar un acceso amplio a profesiones que deben sostener la economía futura, caso particular el de los servicios asociados a salud y educación, que son los que generan empleo y van a seguir generando empleo en el futuro. Si a esto le sumamos que los recientes reportes del sector educativo norteamericano muestran un incremento en los costos de la educación, el problema es mayor: tenemos jóvenes que necesitan estudiar porque se quedaron sin empleo, pero que no lo pueden hacer por el alto costo de las matrículas.

China y Asia no aparecieron de la noche a la mañana. Vienen en un proceso de industrialización de más de 40 años, tiempo suficiente para haber formado, por lo menos, 3 generaciones de estadounidenses. Eso no se hizo, y hoy la economía está en una situación enredada, pues los trabajos tradicionales ya no existen, y quizá no vayan a existir en el futuro. Los mismos se han desplazado al otro lado del mundo y difícilmente retornarán a Estados Unidos, por lo menos por los próximos 40 años, lo cual conlleva grandes connotaciones para la economía e impone retos a los norteamericanos bastante interesantes.

Detengámonos un momento en los últimos reportes de empleo de la economía norteamericana. Al mirar con detenimiento se encuentran cosas bastante interesantes, pues el desempleo sigue manteniéndose en el 9.1%, aunque la fluctuación de generación de empleo es bastante amplia. Esto se debe, lógicamente, a la forma del cambio de categorías como “Fuera de la fuerza laboral”, pues explica cuántas personas no se cuentan en determinado momento del tiempo para el desempleo. Comparado contra un año atrás, este número de personas ha aumentado en casi 3 millones, que son aquellos que se cansaron de buscar empleo y que no lo consiguieron, y decidieron salir de la fuerza laboral. Por eso es muy común escuchar a algunos decir que el problema de desempleo en USA es más grave de lo que las cifras oficiales reportan. Otro dato muy interesante es el que tiene que ver con la razón para estar desempleado, pues lo que más ha aumentado son los “reentrantes”, que son algo así como los que habían salido de la fuerza laboral y volvieron a la búsqueda de trabajo. Aunque el dato de septiembre fue bueno, todavía no es suficiente para corregir el desequilibrio. Con un dato adicional: según las proyecciones, si no se mantiene un nivel de creación de empleo similar al de septiembre durante los próximos meses, la tasa de desempleo podría subir alrededor del 10% en 2012.

De esta forma particular, si todavía pensamos que Estados Unidos reportará grandes números de empleo, estaremos equivocados. Estados Unidos, a menos de que se encuentre con una revolución tan democrática como la de internet, no volverá a tener un desempleo del 6% o inferior. Los sectores que han perdido mayor cantidad de empleo han sido construcción y manufactura en los últimos 4 años, y en particular éste último no volverá a generar los trabajos que se fueron. Pero lograr una revolución como la de internet para sacar a la economía del hoyo, no es fácil: muchos dicen que el siguiente desarrollo se daría con la Biotecnología, más sin embargo este es un sector que requiere amplia capacitación y un conocimiento especializado, que la mayoría de trabajadores que perdieron su empleo no lo pueden hacer. Así, quizá la tasa de desempleo en USA sea la justa para lo que es una economía en transición.

Arriba decía que los empleos manufactureros no volverán a USA por lo menos en 40 años, a pesar de lo que ocurre al otro lado del mundo, incluyendo apreciación de las monedas e incremento de los salarios promedios. Aunque algunos procesos manufactureros quizá regresen, para producir localmente y evitar algunas restricciones de transporte y legales, lo cierto es que el grueso de la manufactura que se fue, permanecerá afuera por mucho tiempo. El cambio se dará por el ajuste económico global y un proceso demográfico futuro: las sociedades asiáticas se irán enriqueciendo, su moneda se irá revaluando, sus salarios irán creciendo y su supuesta ventaja en precios se irá reduciendo. De otra parte estará el tema poblacional: Estados Unidos tendrá una población más joven que países como China, lo cual en términos prácticos lo vuelve más competitivo en el futuro. Según algunas estimaciones, en 2030 China tendrá mayor cantidad de personas por encima de 60 años que toda la población norteamericana, lo cual, obviamente, le restará dinamismo a la economía china. Esto lo sabe el gobierno y no existe una solución rápida y eficaz, pues así se levantara la restricción de un solo hijo (que aplica bajo ciertas circunstancias), tomaría casi 30 años para que la fuerza laboral estuviera lista; mientras tanto, países como India, que mantiene una tasa de natalidad bastante amplia, y Estados Unidos, que se beneficia del número de nacimientos de descendencia latina, tendrán una fuerza laboral más joven a la vuelta de 20 años, lo que les hará ganar competitividad relativa. En el entretanto, la forma que tiene Estados Unidos de mantener su economía, es centrar proceso en soluciones (sector servicios), no manufactura.