La situación actual de las EAFI y su reivindicación de mínimos para dar alas al sector

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Beverly & Pack, Flickr, Creative Commons

Las EAFI se encuentran en una encrucijada. Aunque consideran que la entrada en vigor de MiFID II puede convertirse en un factor generador de nuevo negocio para ellas, lo cierto es que la adaptación de la directiva europea a la normativa española les ha dejado algún que otro sinsabor.

Según el Estudio de las Empresas de Asesoramiento Financiero en España, elaborado por EAF (del Consejo General de Economistas) en colaboración con C&R Investment Financial Advisor EAFI y con datos de 2016, la facturación de estas firmas se ha reducido un 7,90%, aunque se ha incrementado el número de clientes un 6,40% y el patrimonio asesorado en un 12,57%.

Las cifras de este estudio muestran un sector anémico para gran parte de sus entidades. Sólo ocho EAFI en formato persona jurídica facturan más de un millón de euros al año, mientras que 50 entidades facturan menos de 150.000 euros.

En la actualidad, la EAFI media factura 306.084 euros, con un beneficio de 17.568 euros, da empleo a tres profesionales y asesora un patrimonio de entre 60 y 100 millones de euros. Así, la EAFI media es considerada por los autores del estudio como una “microempresa”, ya que únicamente 39 EAFI de las 123 analizadas en el informe facturan más de la media.

Cómo crecer a futuro

Para poder crecer como sector y atraer nuevos actores a la industria de las empresas de asesoramiento financiero, las EAFI hacen una gran reclamación: poder contratar agentes. Sin embargo, con el borrador de transposición de MiFID II en España y el anteproyecto aparejado de Ley del Mercado de Valores, se desecha esta posibilidad. Las EAFI no podrán contratar agentes ni tampoco ser agentes de otras empresas que presten servicios de inversión.

Esta reclamación histórica de las EAFI persigue un doble objetivo: “dar alas al sector e iniciar el despegue definitivo” al extender su capilaridad comercial, así como “ser un incentivo para que muchos profesionales que actualmente están en situación intrusa se regularizasen como EAFI supervisada, regulada y registrada”.

Como “reivindicación de mínimos”, estas entidades proponen otra alternativa: que las EAFI pudiesen pagar a colaboradores externos a las mismas comisiones a terceros en concepto de presentación de clientes.