Las cuatro razones que da J.P.Morgan AM para invertir en Wall Street

4264267637_3b17f178c4
WanderingTheWorld, Flickr, Creative Commons

El índice S&P500 va camino de cerrar uno de los peores ejercicios de su historia. Tanto es así que al cierre del mes de septiembre tan solo había un sector con rentabilidades medias positivas en el año, el de la energía. Sin embargo, precisamente por eso desde la gestora J.P.Morgan AM considera que éste puede ser uno de los mejores momentos para considerar tener al menos una parte de la cartera en el mercado norteamericano.

En un encuentro celebrado con inversores profesionales ha desgranado cuatro aspectos clave que justifican el recorrido que desde estos niveles ven a la bolsa estadounidense.

El primero de ellos se refiere a la economía. Si bien consideran que la primera economía del mundo está ya en recesión defienden que ésta no es severa. De hecho, de los cuatro puntos que analizan para determinar el riesgo de recesión: mercado laboral, manufacturas, consumo y servicios y confianza empresarial, solo uno muestra un elevado riesgo de recesión. "El dato de manufacturas sí presenta ese riesgo pero en EE.UU. no hay que estar tan atentos al dato de manufacturas como pasa con China sino más al de servicios y consumo, que es lo que 68% del PIB", explica Christian Preussner, managing director US Equity Investment Specialist de la gestora.

El consumo es de hecho, el segundo de los puntos en los que se apoya la visión optimista que tienen respecto a EEUU. Este experto considera que pese a que se ha visto un pull back en el consumo ante la mayor precaución como consecuencia del alza de precios , éste acabará repuntando a medida que se normalicen las tasas de inflación. "No vemos que la inflación vaya a subir mucho más allá de sus niveles actuales y acabará retrocediendo a tasas 4% en 2023; seguirá siendo alta pero será la mitad de la vista a lo largo de este 2022", explica.

De ahí que las expectativas de beneficios de las compañías sigan manteniéndose al alza incluso en un contexto de desaceleración económica. "En 2022 ha habido un crecimiento de los beneficios por acción del 5%, pese a que las valoraciones han caído más de un 20%. Esto implica que el mercado ya ha descontado una mala situación pero ahora empezará a fijarse de nuevo en las ganancias y en la vuelta a la normalidad", apunta Preussner. De hecho, desde la gestora estiman un crecimiento de los beneficios del 10% para las empresas del S&P500 en 2022 (6% para 2023), liderados sectores como el industrial, commodities, tecnología y consumo.

El último de los puntos en los que se apoyará la recuperación del mercado americano son las valoraciones. El PER del S&P 500 es muy inferior a la media de los últimos 25 años aunque incide en que hay mucha dispersión por sectores y compañías. "Es en ese contexto cuando gana importancia la selección de compañías". En esa selección optan de momento por dejar fuera a las compañías más growth y centrarse en sectores más value, así como muestran predilección por grandes compañías y no tanto por las pequeñas, con menos capacidad de fijación de precios.