En los últimos cuatro años, las doce mayores gestoras de fondos cotizados del mundo han duplicado sus equipos dedicados a analizar y exigir a los responsables de las empresas buenas praxis en todo lo relacionado con la gobernanza corporativa.
El fuerte crecimiento que están experimentando los ETF está haciendo que cada vez más dinero esté siendo gestionado de forma pasiva… lo que no significa que los proveedores de estos productos vayan a desentenderse de lo que implica ser accionistas o bonistas de las compañías en las que están invertidas. Desde 2014, los mayores proveedores del mundo han decidido que no solamente se van a limitar a ser meros espectadores en las empresas en las que invierten, sino que serán activas a la hora de exigir a los responsables de las empresas buenas praxis en temas relacionados con la gobernanza corporativa. Y, para ello, están reforzando de manera significativa los equipos dedicados a hacer esto posible.
Según un estudio realizado por Morningstar, de las doce gestoras de ETF más grandes del mundo, once han incrementado en los últimos tres años las plantillas de estos departamentos. La que ha realizado un mayor esfuerzo en este sentido ha sido BlackRock. De acuerdo con los datos de la firma de análisis, entre los años 2014 y 2015, la entidad contaba con un capital humano formado por 20 profesionales. En 2017, la cifra se había elevado hasta los 33. De los 6,3 billones de dólares en activos bajo gestión que tiene BlackRock actualmente, en torno al 65% corresponde a soluciones indexadas, lo que da muestras de lo importante que podría ser que una gestora de su tamaño empezase a ser activa a la hora de ejercer su influencia para que las empresas mejoren sus prácticas corporativas.
Esos 33 profesionales dedicados a practicar el activismo con los que cuenta la entidad forman parte de un equipo interno denominado el BlackRock Investment Stewardship (BIS), cuya misión concreta es fomentar prácticas empresariales y de gestión que cimienten resultados financieros sostenibles a largo plazo, así como reforzar la interacción con los consejos empresariales y promover las mejores prácticas en material de gobierno corporativa en las empresas en las que invertimos. Otro objetivo de este equipo es proporcionar análisis especializados sobre responsabilidad social corporativa (ESG) en todas las estrategias de inversión, ya sean de gestión activa o pasiva, para que las empresas puedan contribuir de manera positiva a la sociedad.
Para poner en contexto la importancia que le están dando los diez mayores proveedores de ETF a este tema basta reseñar que, hace apenas cuatro años, el número total de profesionales que conjuntamente tenía el top 12 era de 61. A cierre de 2017 esa cifra se había prácticamente duplicado, al alcanzar los 113. Tras BlackRock, las que más han apostando por incrementar recursos humanos en esta área han sido Vanguard (ha duplicado su plantilla al pasar de los 10 profesionales que tenía en 2014 a los 21 actuales) y UBS Asset Management (los ha elevado de 4 a 11).
También resulta interesante reseñar que, en 2014, tres gestoras de ETF del top 10 (Nikko AM, Deutsche AM y Lyxor) no contaban con equipos específicos para trabajar en este departamento y ahora sí, lo que pone de manifiesto la relevancia que las entidades le están dando a evaluar la gobernanza corporativa de las compañías en las que invierten, las estrategias corporativas, que la remuneración a los directivos vaya íntimamente ligada a objetivos de largo plazo o el impacto climático, entre otros factores.
Gestora |
Miembros del equipo de gobierno e inversión responsable entre 2014 y 2015 |
Miembros del equipo en 2017 |
Variación |
BlackRock |
20 |
33 |
+13 |
Vanguard |
10 |
21 |
+11 |
Legal & General |
9 |
11 |
+2 |
State Street |
8 |
11 |
+3 |
UBS AM |
4 |
11 |
+7 |
Amundi |
5 |
5 |
= |
Nomura AM |
0 |
5 |
+5 |
Geode (Fidelity) |
3 |
4 |
+1 |
Nikko AM |
0 |
4 |
+4 |
DWS |
0 |
3 |
+3 |
Schwab |
2 |
3 |
+1 |
Lyxor |
0 |
2 |
+2 |
TOTAL |
61 |
113 |
+52 |
Fuente: Morningstar con datos a cierre de 2017.