El fondo aplica un enfoque disciplinado en la asignación de activos
El fondo aplica un enfoque disciplinado en la asignación de activos, implementado por un equipo experimentado y estable. Se gestiona con un enfoque distintivo y de base cuantitativa con una filosofía muy clara en el control del riesgo al tiempo que busca maximizar los retornos, pero también evitar pérdidas de capital en un horizonte temporal de tres años. En vez de partir de una visión “top-down”, el foco está en identificar las verdaderas fuentes de riesgo/rentabilidad que aportan las distintas clases de activo. Esto le confiere un enfoque muy flexible sin un índice de referencia.
La cartera resultante es muy diversificada. El segmento de renta variable consiste en acciones de baja volatilidad. La renta fija sigue siendo la principal fuente de retorno risk-off, pero para limitar los riesgos inherentes a una subida de tasas el equipo ha aumentado el peso de inversiones defensivas en la cartera.
El fondo se creo en noviembre de 2005. Desde esa fecha han estado al frente de su gestión Asbjørn Trolle Hansen, Kurt Kongsted y Claus Vorm.