Omega Gestión de Inversiones sigue apostando por el formato fondo de inversión libre (FIL) de retorno absoluto, uno de los diseños básicos de su gama, que ya asciende a siete productos. En esta ocasión, la gestora española lanza Prisma, un FIL global y multiestrategia que busca preservar capital y conseguir rendimientos absolutos a largo plazo con una baja correlación con los mercados de renta variable y renta fija.
Para lograrlo, explica su folleto en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), invertirá fundamentalmente en fondos con liquidez diaria, combinando, con un alto grado de diversificación, la inversión en fondos tradicionales -principalmente, de gestión alternativa- y en FIL y FoFIL. Su objetivo de volatilidad es del 6% anual, mientras que su objetivo de rentabilidad media anual aspira a situarse entre el 6% y el 8%, sin estar garantizado.
No obstante, el nuevo FIL de Omega también puede invertir de forma directa en renta fija y renta variable. En caso de hacerlo, no podrá realizar estrategias de gestión alternativa en esta parte.
La aspiración de Prisma es “seleccionar los mejores gestores, independientemente de la estrategia que implementen”. El número de fondos que pueden entrar en cartera oscila entre los cinco y los 40 vehículos. Los fondos de gestión alternativa y liquidez diaria en los que invierta han de utilizar estrategias de valor relativo, global macro, eventos corporativos y long/short.
El séptimo fondo de Omega nace con tres clases de participación disponibles: la I, con una inversión mínima inicial de 100.000 euros y unas comisiones de gestión, resultados y depósito del 1,25%, del 7% y del 0,1%, respectivamente; la II, con un mínimo de un millón de euros y comisiones del 0,65%, del 7% y del 0,1%, y la III, dirigida a fondos y sicav del grupo Omega y, por tanto, con solamente una comisión de depósito del 0,1%. Además de estas comisiones directas, también soporta otras indirectas derivadas de la inversión en otros fondos. La de gestión es del 3% y, la de depósito, del 1%.
