TRIBUNA de Erik Rubingh, responsable de estrategias sistemáticas de BMO Global Asset Management y gestor del fondo BMO Global Equity Market Neutral (SICAV). Comentario patrocinado por BMO Global AM.
Ventajas de los estilos
En muchas carteras, suele considerarse que las rentabilidades están determinadas por dos impulsores principales: la exposición al mercado (beta) y la destreza del gestor del fondo (alfa). No obstante, si se deconstruye el elemento alfa, puede identificarse un tercer conjunto: los estilos y la mayor rentabilidad intrínseca o primas que generan.
Invertir en estilos puros
Un modo de aprovechar las primas de estilo es clasificar un índice por una característica de estilo particular e invertir de acuerdo con ello. Sin embargo, la clasificación e identificación de estilos de forma indisciplinada puede no dar siempre los resultados deseados. Por ejemplo, un enfoque simplista no reconoce el hecho de que los estilos no carecen totalmente de correlación, lo que significa que, al combinarse, existe un cierto grado de solapamiento en sus características de rentabilidad. Asimismo, esto reduce las ventajas de la diversificación y debilita el potencial de rentabilidad.
Nuestra solución consiste en tomar los estilos en su estado básico y después aplicar una metodología sistemática con el objetivo de eliminar los componentes compartidos a fin de llegar a una métrica mejorada del estilo deseado. Esta metodología de estilos puros aporta una serie de ventajas potenciales. Comprenden:
- una menor correlación entre estilos,
- un mayor potencial de rentabilidad a largo plazo,
- una volatilidad reducida.
Centrados en el estilo puro
Rentabilidad simulada contrastada (back-tested)
Además de reducir la correlación entre estilos como los de valor, crecimiento y momentum, nuestro enfoque puede dar lugar a exposiciones individuales caracterizadas por una volatilidad menor que la de sus homólogas básicas. En el ejemplo siguiente se muestra el estilo puro de empresas de valor, caracterizadas por un elevado ratio de precios sobre valor en libros.
Multiestilos y diferentes usos
Es importante reconocer que ningún estilo por sí solo registra continuamente una rentabilidad mayor, lo que significa que tiene sentido combinar exposiciones con estilo individual en una cartera multiestilos capaz de generar rentabilidades de una forma más constante. Enfocamos la construcción de la cartera de forma sistemática y ponderamos las exposiciones a estilos según su aportación al riesgo global de la cartera más que sobre la base de un juicio subjetivo del tipo creemos que es probable que el crecimiento sea más rentable que el valor.
Nuestra metodología de estilos puros puede utilizarse de diversas formas. En un formato únicamente largo, puede usarse con vistas a superar la rentabilidad del índice de referencia, mientras que utilizar una combinación de posiciones largas y cortas ofrece margen para generar rentabilidades positivas con una baja correlación en cualquier situación del mercado.
Debe recordarse que las rentabilidades pasadas no son indicativas de rentabilidades futuras. El valor de las inversiones y los ingresos provenientes de las mismas pueden disminuir al igual que aumentar como consecuencia de oscilaciones de los mercados bursátiles o las divisas, y los inversores podrían no recuperar el importe invertido originalmente.