¿Por qué Emerging Markets Leaders en este momento?

Vishal Gupta_noticia
Cedida por Morgan Stanley IM.

TRIBUNA de Vishal Gupta, managing director, portfolio manager del Emerging Markets Leaders Strategy, MSIM. Comentario patrocinado por Morgan Stanley IM.

Tras la peor década de la historia para el rendimiento de la renta variable de mercados emergentes, los inversores están empezando a regresar a esta clase de activos, atraídos por sus interesantes oportunidades de crecimiento. Según los análisis de J.P Morgan y EPFR, las entradas en renta variable de mercados emergentes durante las siete primeras semanas y media de 2021 han alcanzado un total de 47.000 millones de dólares estadounidenses, prácticamente el 2,5% de los activos gestionados. Y aun así hay dudas en medio de este auge. 

Nuestros análisis demuestran que, en una cartera global típica, la asignación a mercados emergentes se sitúa aproximadamente entre el 20% y el 50% de lo que recomendarían los modelos de asignación racionales. La explicación posible para esto es el sesgo nacional de los inversores recelosos de lo lejano y lo desconocido, incluso cuando existen oportunidades atractivas. Buscan una guía fidedigna, por lo que merece la pena valorar de cerca la estrategia Emerging Markets Leaders.

Lanzada en 2011, la estrategia Emerging Markets Leaders se diseñó para aprovechar las buenas oportunidades que encontramos en los mercados emergentes, reduciendo al mínimo, al mismo tiempo, los riesgos del mercado. Nos centramos en compañías grandes, con un crecimiento de calidad y bien gestionadas (por ejemplo, empresas con una capitalización de mercado superior a 1.000 millones de dólares estadounidenses, un retorno sobre el capital invertido superior al 15% y una TCAC prevista de los beneficios superior al 15%). Estas compañías deben estar posicionadas para aprovechar temas estructurales a largo plazo y desarrollar su actividad en sectores favorables para líderes del mercado.

Nuestras inversiones se centran mayoritariamente en los que denominamos mercados de tamaño continental de China, India, Brasil e Indonesia, países con grandes poblaciones e ingentes mercados nacionales. Es de esperar que estos mercados estén bien posicionados en una era de desglobalización y descenso de los flujos comerciales. Incorporamos Taiwán a la cesta, pues es una pieza fundamental de la cadena de suministro del sector tecnológico a escala global. Todos estos países cuentan además con dinámicas comunidades empresariales, bien posicionadas para aprovechar los temas estructurales a largo plazo.

En este momento, entre esos temas se encuentran, principalmente, el auge del comercio electrónico, la entrega de comida a domicilio, la penetración del fintech, el athleisure y la premiumización del consumo. Además del gran salto en la adopción de estas tendencias, la pandemia también ha situado el foco en el tema sanitario.

Esta lista no es completamente exhaustiva, pero casi. Evitamos valores que no encajan en nuestros temas estructurales o no cumplen nuestros criterios de inversión, incluso en países de nuestra preferencia. Por ejemplo, ahora mismo evitamos bancos de la mayoría de los mercados emergentes y compañías de materiales y cíclicas, así como otros sectores que consideramos en declive estructural.

El siguiente gráfico (véase el gráfico 1) es un claro ejemplo de por qué concentramos la mayoría de las inversiones en un conjunto relativamente reducido de mercados de tamaño continental: porque es en esos mercados donde se encuentran la mayoría de los grandes compounders. Como indicamos con anterioridad, todas nuestras compañías deben presentar una capitalización de mercado mínima superior a 1.000 millones de dólares estadounidenses y prever una tasa de crecimiento compuesto de los beneficios de más del 15% para los próximos tres a cinco años. Este horizonte de inversión más a largo plazo nos brinda la confianza necesaria para seguir ciñéndonos a estos compounders estables en épocas de sacudidas en los mercados.

Gráfico 1: número de compañías compounders con una TCAC superior al 15% (capitalización de mercado superior a 1.000 millones de dólares estadounidenses)

Por país de la entidad, tasa de crecimiento anual compuesto (TCAC) 2016 – 2020 (en dólares estadounidesnes)

Fuente: FactSet, cálculos de MSIM. Datos a 31 de diciembre de 2020. El CAGR representa la tasa de crecimiento anual compuesta, calculada para el periodo de 2016 a 2020 en dólares estadounidenses. Capitalización de mercado calculada a 31 de diciembre de 2015. Valores agrupados por el país de la entidad según FactSet.

Si bien hemos invertido principalmente en compounders estructurales de mercados emergentes de tamaño continental, estamos abiertos a nuevas oportunidades según surjan. Aunque numerosos países de Europa oriental, como Polonia, Hungría y República Checa, han registrado sólidas cifras de crecimiento del PIB, no hemos logrado encontrar numerosas oportunidades de inversión, pues muchas de las compañías de consumo locales han sido adquiridas por multinacionales globales. En el pasado, poseíamos valores de los sectores minorista y financiero como un modo de procurarnos exposición al auge de las clases medias en Europa oriental, pero ya no se ajustan a nuestro perfil de crecimiento. Valoraríamos nuevas oportunidades de inversión según aparezcan.

Aunque numerosas carteras globales, internacionales y equilibradas tienden a contar con cierta exposición a mercados emergentes, nuestro equipo de inversión Global Emerging Markets demostró recientemente lo magras que son estas inversiones. La información de tres importantes proveedores de datos, según se muestra en el gráfico 2, apunta a asignaciones a mercados emergentes de entre el 6% y el 8%. Por otra parte, los análisis de nuestro equipo GEM, que incorporan los tres enfoques de asignación más consolidados (ponderación por PIB, ponderación por mercado y teoría moderna de carteras), recomendarían asignaciones a mercados emergentes de entre el 13% y el 39%.

Gráfico 2: asignaciones óptimas frente a efectivas a renta variable de mercados emergentes (%)

Fuente: FactSet, Haver, FMI, Global Financial Data, eVestment, Morningstar, EPFR, y cálculos de MSIM. Datos a 31 de diciembre de 2020.

El método de la ponderación por PIB, con el que se capta la importancia económica relativa de cada país, arrojaría la mayor asignación potencial del 39%. De manera alternativa, emplear el método de ajuste ponderado por el PIB (por el menor capital en libre circulación y la dilución de las compañías cotizadas) seguiría arrojando una asignación del 17%, el nivel más bajo de entre los enfoques de asignación. Sin embargo, este nivel sería mucho mayor que las asignaciones reales indicadas por los proveedores de datos EPFR, Morningstar y eVestment y mayor que la ponderación de MSCI Emerging Market en el índice MSCI All Country World (véase el gráfico 2). No importa lo racionales que sean, pues nuestro análisis indica que los inversores están infraponderando los mercados emergentes de forma irracional.

Puede que eso sea más cierto que nunca antes. La pandemia ha acelerado numerosas tendencias estructurales de consumo, incluido el auge de las fintech y el comercio electrónico, y Emerging Markets Leaders está bien posicionada para captar estas tendencias. La estrategia no está supeditada a ningún índice de referencia ni tampoco a una lista de países o compañías en concreto. Cuando varíen las condiciones globales y surjan nuevos temas, es probable que nuestras inversiones también cambien. Sin embargo, persistirá el proceso: el foco en compañías de grandes dimensiones y calidad orientadas a aprovechar temas de mercados de tamaño continental. En ese sentido, los nuevos inversores en Emerging Markets Leaders pueden estar tranquilos.


Consideraciones sobre riesgos

No existe garantía de que una cartera vaya a alcanzar su objetivo de inversión. Las carteras están expuestas al riesgo de mercado, que es la posibilidad de que los valores de mercado de los títulos de la cartera bajen y que, por consiguiente, el valor de las acciones de la cartera sea inferior al que usted pagó por ellas. Los valores de mercado pueden cambiar a diario por acontecimientos económicos y de otro tipo (por ejemplo, catástrofes naturales, crisis sanitarias, atentados terroristas, conflictos y disturbios) que afecten a mercados, países, compañías o gobiernos. Resulta difícil predecir el momento en que se producirán tales acontecimientos, así como su duración y sus posibles efectos adversos (por ejemplo, para la liquidez de las carteras). En consecuencia, su inversión en esta cartera podrá comportar pérdidas. Tenga en cuenta que esta cartera puede estar sujeta a determinados riesgos adicionales. En general, los valores de los títulos de renta variable también fluctúan en respuesta a actividades propias de una compañía. Las inversiones en mercados extranjeros comportan riesgos específicos, como, por ejemplo, de divisa, políticos, económicos, de mercado y de liquidez. Los riesgos de invertir en países de mercados emergentes son mayores que los riesgos asociados en general a inversiones en países desarrollados extranjeros. Las acciones de compañías de pequeña y mediana capitalización entrañan riesgos específicos, como una limitación de líneas de productos, mercados y recursos financieros y una volatilidad de mercado mayor que los títulos de compañías más grandes y consolidadas. Los instrumentos derivados pueden ser ilíquidos, podrían incrementar las pérdidas de forma desproporcionada e imprimir un efecto negativo potencialmente amplio en la rentabilidad de la cartera. Los títulos ilíquidos pueden ser más difíciles de vender y de valorar que los que cotizan en mercados organizados (riesgo de liquidez). Las carteras no diversificadas a menudo invierten en un número más reducido de emisores. En consecuencia, los cambios en la situación financiera o el valor de mercado de un solo emisor pueden causar una mayor volatilidad. Los valores de colocaciones privadas y restringidos pueden estar sujetos a restricciones de reventa, así como a la falta de información pública, lo que aumentará su iliquidez y podría afectar negativamente a la capacidad de valorarlos y venderlos (riesgo de liquidez).