Un buen momento de recordar la importancia del agua

Ana Claver_Robeco_noticia2
Firma: FundsPeople.

TRIBUNA de Ana Claver Gaviña, CFA, responsable para Iberia, U.S. Offshore y Latam, Robeco, y presidenta del Comité de Sostenibilidad, CFA Society Spain. Comentario patrocinado por Robeco.

De la misma manera que éramos conscientes de la necesidad del gas durante las fuertes subidas de precios del pasado invierno, y nos acordamos de los fríos de la Europa del Norte, cuando va llegando de forma acusada el calor a la Europa Mediterránea, recordamos reiteradamente la importancia del agua. Según el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático 2021-2030, en España, la tendencia marcada nos indica una disminución en las precipitaciones, la desaparición de los glaciares, un menor caudal medio de los ríos, y la expansión del clima semiárido.

Seguro que en nuestra casa no sentiremos la falta del agua, pero otros sectores clave de nuestra economía, como la agricultura y la ganadería, la silvicultura, o el turismo, dependen del clima, como también otros campos esenciales para nuestro bienestar, como la salud humana o la biodiversidad. El cambio climático es una amenaza que, a veces, nos parece reside en un nivel diferente al nuestro. Sin embargo, aunque es en la mitigación donde empleamos muchos de nuestros esfuerzos, la adaptación es clave, y más al referirnos a los recursos hídricos disponibles.

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en su balance climático del invierno 2021-2022 corrobora que fue extremadamente seco y muy cálido, con el 45% de las precipitaciones habituales. Ante la situación actual de sequía en diferentes países, los ministros de Agricultura de España y Portugal plantearon en estos últimos meses a la Comisión Europea la grave situación causada por la sequía en sus países y la posibilidad de movilizar fondos comunitarios para apoyar al sector.

La escasez de agua no es solo un problema ambiental, es también una preocupación financiera evidente, ya que los riesgos asociados pueden tener un impacto sustancial en el rendimiento financiero de las empresas.

Nuestra estrategia RobecoSAM Sustainable Water Equities invierte en soluciones para tratar con este desafío que llega. La mejor solución en nuestra mano es maximizar los recursos hídricos en sus diferentes etapas, como son la toma y el reciclado de agua. Además, en zonas con un mayor estrés hídrico, las empresas de nuestra cartera desarrollan métodos que tratan de afianzar el suministro en su zona. Países con acceso al agua de mar investigan en plantas desalinizadoras, y los que carecen de costa se vuelcan en tecnologías de captura eficiente del agua de lluvia.

Continuamos, como en otros ámbitos donde nos centramos, en nuestra apuesta por la tecnología; aquí, por ejemplo, con empresas que invierten en membranas especiales de filtrado o el empleo de la luz ultravioleta, que facilitarán el acceso al agua potable en regiones con escasez de agua, pero también sensores, válvulas y analítica inteligentes que detectan fugas o contaminación.

Resulta una estrategia adecuada para ayudar a los inversores a conectar con proveedores de este tipo de soluciones, que luchan contra la escasez de agua y fomentan el acceso a un agua limpia, segura y accesible para personas, negocios y el propio ecosistema. Selecciona empresas bien posicionadas a la hora de beneficiarse de estas tendencias de largo plazo, atendiendo a la demanda de productos y servicios a lo largo de toda la cadena.

La cartera está formada por empresas de cierta envergadura y características sostenibles, con capacidad de proveer soluciones creíbles y viables al desafío del agua. Entre sus líneas se encuentran:

  • Servicios públicos con empresas centradas en infraestructura y suministro de agua para clientes comerciales, residenciales e industriales.
  • Instalaciones de gestión de residuos.
  • Análisis para el tratamiento en el punto de consumo, control de calidad del agua y mantenimiento para reducir el consumo.
  • Bienes de capital y productos químicos con empresas centradas en tuberías, válvulas, bombas y otros equipos para extracción, transmisión, distribución, riego, tratamiento químico y reutilización
  • Construcción y Materiales para equipos de ingeniería, materiales de construcción, fontanería interior, etc.

Siempre hemos debido estar atentos a todo aquello que acompaña al agua, pero es justo ahora cuando se convierte en una posibilidad de inversión meditada. Las consecuencias del cambio climático de cara a sequías o inundaciones, potenciadas por las cada vez mayores extensiones de asfalto donde vivimos con unas crecientes necesidades de alcantarillado, o el envejecimiento de las infraestructuras que permiten el acceso al agua potable (se estiman 39.000 millones de dólares en pérdidas por roturas y fugas en el mundo al año) deben ir hallando soluciones.

La OCDE estima que, en 2030, las inversiones en infraestructuras hídricas que necesitan las ciudades y comunidades para mantenerse a flote podrían alcanzar los 6,7 billones de dólares estadounidenses anuales. Y en EE.UU., el presidente Biden ha aprobado un proyecto que dedicará casi 50.000 millones para modernizar los sistemas de suministro de agua potable y gestión de aguas. Son oportunidades que, pese a su importancia, se ven eclipsadas por las que surgirán ante el aumento esperado de población: 9.700 millones para 2050, que suponen 65 millones de personas más que alimentar al año, y las nuevas necesidades ante el incremento del número de megaciudades de más de 10 millones de habitantes.

Nuestro fondo de agua se lanzó en 2001, siendo uno de los primeros en descubrir el gran desafío que supone para la sostenibilidad la gestión de los recursos hídricos. Han sido 20 años de crecimiento y de atractivos beneficios, desde su creación. Este historial y el compromiso con las inversiones sostenibles son solo algunas de las cosas que hacen que la estrategia de RobecoSAM Sustainable Water Equities sea una inversión convincente, estando clasificado como Artículo 9 (SFRD).