"Una de las ventajas que ofrecen los UCITS y que es muy valorada por las gestoras en general, incluyendo las latinoamericanas, es que con un sólo fondo registrado en Luxemburgo atienden no sólo a los inversores europeos, sino también a los de otras regiones, incluso al mercado local. Es algo que está realizando las gestoras brasileñas, por ejemplo. Así, pueden tener inversores en Europa, Asia y Latinoamérica con el mismo fondo", explica la experta.
Otra de las ventajas es que se trata de un instrumento que es reconocido globalmente, y que es un instrumento regulado. "Muchos inversionistas, cuando se les ofrece un producto registrado, por ejemplo, en las Islas Caimán, piden una alternativa europea que esté regulada". Todo depende del grado de seguridad que quiera el inversor. "Y en este sentido, Luxemburgo tiene una muy buena imagen, por lo que los inversores latinoamericanos y globales los consideran un instrumento seguro". Además, "vale la pena recordar que se trata de una industria con 25 años de historia", apunta.