Reflexiones de banca privada para 2022: la opinión de Banca March, BNP Paribas WM, Ibercaja Banco y Tressis

La inflación está superando las expectativas y eso nos lleva a pensar que superará el 6,5% en el promedio de 2022. En estas circunstancias la inflación se convierte en un enemigo real para los ahorros de los inversores por lo que es necesario buscar diferentes productos y estrategias de inversión personalizadas que sean acordes con los objetivos y necesidades de los inversores.

Nuestra línea de innovación de productos tiene como objetivo cubrir todo el espectro de clientes, desde el ahorrador hasta el cliente más sofisticado, poniendo énfasis en soluciones de riesgo medio-bajo donde la situación de la renta fija tradicional deja un mayor hueco de necesidades por cubrir.

En un escenario de inflación elevada cobra importancia contar con un asesoramiento profesional y personalizado. Es precisamente cuando surgen las dificultades o los imprevistos cuando nuestro sector debe dar un paso adelante para dar soluciones a nuestros clientes. Para algunos inversores este escenario de inflación alta es una novedad, pero no para entidades con una larga historia, como la nuestra.

El cliente de BNP Paribas Wealth Management es un inversor global que invierte en todo el mundo y que, en la situación actual de elevada inflación y alta volatilidad en los mercados, está realizando cambios y adaptando su cartera con nuestro asesoramiento. Nuestra visión europea y no sólo local, es diferencial en estos momentos.

En lo que a cliente se refiere, la inflación podría llevar a cambios en los  perfiles de riesgo de los clientes, ya que la sensación de pérdida de poder adquisitivo podría llevar a los clientes a asumir algo más de riesgo en renta variable para  intentar compensarlo.

Si bien consideramos que esta inflación no deja de ser temporal aunque se tarde cierto tiempo en reajustarse y por tanto no creo que sean muchos los cambios en este aspecto. En todo caso veo que el escenario de la inflación afectará  a la composición de las carteras más que al sector de Banca Privada como tal.

Por un lado estamos viendo impacto de trasvase de algunos clientes hacia perfiles de riesgo más elevados que buscan batir la inflación. Por otro lado, vemos un interés creciente por inversiones con menor liquidez para complementar la diversificación de los patrimonios. En estos dos casos es fundamental que los asesores trasladen muy bien las características tanto de los perfiles de riesgo como de los productos ilíquidos y evalúen su idoneidad para cada cliente en función de las circunstancias de cada uno.

Por último, podemos enfrentarnos al escenario de necesidades de liquidez de algunos clientes para hacer frente a situaciones en sus empresas derivadas de la situación económica. Tener un servicio de planificación patrimonial y fiscal nos permite analizar las distintas alternativas tanto de diversificación como de riesgo o de liquidez con el cliente, anticipándonos en situaciones importantes para ellos.