Ha registrado en la CNMV Sássola Selección Base, que tiene un objetivo de volatilidad inferior al 5% anual y una exposición a renta variable entre el 0 y el 50%
En apenas un par de semanas Sássola Partners ha lanzado dos productos: primero registró Sássola Selección Dinámica (su primer fondo) y ahora acaba de lanzar Sássola Selección Base. Ambos son fondos de fondos, con la diferencia de que el primero está enfocado a inversores con un perfil más arriesgado mientras el segundo, a aquellos más conservadores.
Según consta en su folleto, Sássola Selección Base tiene un objetivo de volatilidad inferior al 5% anual y una exposición a renta variable entre el 0 y el 50%. "Está pensado para clientes con menos tolerancia al riesgo, que tradicionalmente sólo tenían depósitos y renta fija pero con la situación actual de los tipos de interés, han decidido invertir con algo más de volatilidad en busca de una rendimiento aceptable", explican desde la propia gestora.
Tiene dos tipos de participaciones: la clase A, con una inversión mínima de 10 euros, y la clase institucional, cuya inversión inicial debe ser como mínimo de 750.000 euros.
El gestor de ambos productos es José María Loinaz, responsable del área de estrategia y gestión y socio de la firma junto con Miguel Irisarri, que se encarga de la relación con los clientes y negocio. "Ambos son fondos de fondos, así que nuestro trabajo es hacer una correcto Asset Allocation y la identificación y selección de los gestores", comentan.
En principio, no tienen pensado lanzar más productos a corto plazo, avanza Irisarri. "En este momento gestionamos y asesoramos carteras de fondos para clientes por encima del millón de euros y tenemos dos fondos de fondos con los que podemos ofrecer nuestros servicios de una manera eficiente a inversores de cualquier tamaño", justifica.