Seilern Stryx World Growth: un fondo que tiene un guardián que vela por su filosofía de inversión

Michael Faherty y Marco Lo Blanco (Seilern)
Fotos: cedidas por Seilern.

El Seilern Stryx World Growth es un fondo de renta variable global con Sello Funds People en 2019, con las calificaciones de Favorito de los Analistas y Blockbuster. Gestionado por Michael Faherty (en la izquierda de la imagen) y Marco Lo Blanco, invierten mayoritariamente en empresas de elevada calidad, que coticen en las bolsas de valores de países de la OCDE y, sobre todo, en Estados Unidos y en países de Europa Occidental que pertenezcan a la OCDE. Buscan oportunidades de inversión en empresas grandes y exitosas, con un historial de buenos resultados y que tengan posibilidades de ofrecer crecimiento en un futuro.

Su estilo de inversión se define como crecimiento de calidad de gran capitalización. Seilern es una gestora con un enfoque estrictamente bottom-up, que no tiene en cuenta ninguna visión macroeconómica a la hora de construir las carteras. La gestora cree firmemente que el crecimiento de los beneficios de una compañía se verá reflejado a largo plazo en el precio de la acción. De acuerdo con esta filosofía, centran sus inversiones en compañías excepcionales, que demuestren de manera recurrente que son capaces de hacer crecer sus beneficios.

Están convencidos de que invertir en este tipo de compañías a largo plazo proporcionará al inversor retornos por encima de la media asumiendo un nivel de riesgo inferior. Para conseguir este objetivo, las empresas a incluir en cartera han de cumplir una serie de características, que la gestora llama las 10 reglas de oro: 1) han de tener un modelo de negocio estable, 2) desarrollar su actividad en un sector con crecimiento estructural, 3) ser compañías líder dentro de su sector, 4) contar con una ventaja competitiva sostenible, 5) lograr un crecimiento orgánico a partir de las ventas 6) ser poco intensivas en cuanto a capital y tener una tasa de retorno sobre capital invertido alta 7) baja concentración de clientes y presencia geográfica diversificada 8) balance sólido 9) gobierno corporativo ejemplar y equipo directivo excelente y 10) transparencia contable.

Una vez que encuentran una compañía que presenta estas características, pasa a ser candidata para formar parte del universo Seilern. Hay que tener en cuenta que hay muchos sectores que no cumplen estas reglas de oro, por lo que hay muchos sectores en los que no invierten (bancos, aseguradoras, utilities, telecos, materias primas, autos o aerolíneas). Esta característica tendrá una gran influencia en el comportamiento del fondo en los distintos entornos de mercado.

Lo más característico del proceso de inversión de la gestora es el universo Seilern, que incluye entre 60 y 70 compañías y a partir de la cual los gestores podrán construir sus carteras. Si una compañía no pertenece a esta lista, el gestor no podrá añadirla a la cartera bajo ninguna circunstancia. Esta lista está compuesta por las empresas que la gestora considera que son las mejores del mundo en cuanto a calidad, crecimiento y predictibilidad. Aproximadamente el 50% de las compañías de esta lista son americanas y el 50% europeas.

Para que una compañía entre en el universo, un analista tiene que redactar un documento de iniciación o documento base, de entre 30 y 100 páginas, conforme avanza en el proceso de análisis de esa compañía. Este proceso puede durar entre un mes y un año, dependiendo de la complejidad de dicha compañía. Una vez el analista ha escrito dicho documento, la empresa seleccionada tendrá que obtener la aprobación unánime de todos los gestores. Si esto ocurre finalmente, el analista tendrá que hacer una presentación al presidente y fundador Peter Seilern quien, como guardián y garante de la filosofía de inversión, tiene derecho final de veto. Solo y exclusivamente tras todo este proceso, una compañía pasará a formar parte del universo Seilern.

Es el universo Seiler, por tanto, el principal generador de alfa de las carteras de la gestora. Es mucho más relevante el proceso de filtrar las 40.000 compañías que cotizan en los países de la OCDE, para reducirlo a una lista de entre 60 y 70 compañías que conforman el universo Seilern, que el proceso de pasar de 30 compañías que tiene el universo Seilern americano a las 19 que tiene la cartera del fondo Stryx America. Se construyen así carteras concentradas, de entre 17 y 25 compañías excepcionales. Una vez que identifican uno de estos negocios, permanecen invertidos en él a largo plazo.

El equipo de gestión de Seilern se diseñó ya en 1989 con un modelo según el cual no tuviera riesgos de tipo gestor, de forma que la relevancia que un gestor puede tener sobre el fondo es ínfima. En el caso concreto del Seilern Stryx World Growth, la función del gestor es la selección de compañías que ya han pasado el filtro de las reglas de oro de Seilern, por lo que la principal aportación de alfa del producto proviene principalmente de la correcta incorporación de valores al universo.