Tres años después de MiFID II, la CNMV repasa los logros y señala las áreas de mejora de la normativa europea

Rodrigo Buenaventura, CNMV
Rodrigo Buenaventura, CNMV

En la primera jornada organizada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores, enfocada en valorar los tres años de la normativa MiFID II, Rodrigo Buenaventura, presidente del supervisor español, ha reflexionado acerca de los logros conseguidos.

“Creo que podemos afirmar que MiFID II ha permitido una mejora notable en transparencia en los mercados, una mejor y más homogénea información recibida por el inversor y un mayor conocimiento por parte de los clientes” contextualiza Buenaventura. Por otro lado, considera que también ha permitido adaptar la normativa original a un nuevo entorno y a la evolución de los mercados, permitiéndose una mayor accesibilidad del conjunto de la sociedad a los mercados.

El presidente de la CNMV ha dividido en cuatro áreas los efectos positivos de la normativa en los mercados europeos. En primer lugar, piensa que ha mejorado el campo de juego entre los mercados y sus participantes. Según Buenaventura, el cambio en la estructura de los mercados financieros en Europa ha tenido un impacto significativo en el ámbito de la renta variable.

Otro impacto positivo para el presidente está en la protección de los inversores. El presidente de CNMV destaca las nuevas herramientas de gobernanza de productos, así como la posibilidad de prohibir determinados productos para inversores minoristas y las políticas reforzadas de conflicto de intereses, especialmente en la actividad de asesoramiento. En sentido, incluye una mención especial al nuevo régimen de incentivos.

Por otro lado, subraya el nuevo régimen de transparencia para los mercados de renta fija y derivados. “MiFID II estableció por primera vez un conjunto de requisitos de transparencia de la UE y ha acelerado la transición a la ejecución electrónica en el mercado de renta fija”, contextualiza.

Finalmente, no pasa por alto como efecto positivo a la eliminación de las barreras de entrada a la competencia transfronteriza en las infraestructuras de negociación, compensación y liquidación.

Áreas de mejora

Sin embargo, después de haber indicado los progresos provocados por MiFID II, Buenaventura ha señalado las áreas de mejora en las que trabaja ESMA. Entre ellas, la calidad y coste de los datos, así como la usabilidad y comparabilidad de la información divulgada. “La CNMV apoya la sugerencia de la ESMA de simplificar la presentación de informes al tiempo que se mejora la calidad, la compatibilidad y la facilidad de uso de los datos”, añade Buenaventura.

En lo que respecta a las normas de protección de los inversores, Buenaventura cree que es probable que necesitemos un replanteamiento del régimen de incentivos, de forma totalmente armonizada. “También sería conveniente racionalizar más la información que se facilita a los clientes (como la relativa a la mejor ejecución o a los costes y gastos)”, añade.

Por otro lado, considera que se necesitarán verdaderos incentivos para el acceso al mercado de las pequeñas y medianas empresas, y mejoras en el funcionamiento de los OTFs. Además, considera que se deberían revisar los mecanismos para limitar la negociación oscura de órdenes. En cuanto a la renta fija, también apoya las propuestas de ESMA dirigidas a simplificar y hacer más eficiente el régimen actual, que promueve una aplicación armonizada en toda la Unión Europea y garantiza una mayor transparencia para los participantes en el mercado, en particular para los mercados de derivados y de bonos.