Víctor de la Morena (Amundi Iberia): “El 2022 será el año de la verdad para la inversión sostenible”

Victor de la Morena. Amundi
Victor de la Morena. Firma: Amundi (Cedida)

El director de Inversiones de Amundi Iberia, Víctor de la Morena, pronostica un escenario central para 2022 con baches y divergencias territoriales. Sin embargo, para el año que viene tiene una cosa clara y es que “el 2022 será el año de la verdad para la inversión sostenible”.

Según de la Morena, “hasta ahora nos hemos ido preparando, pero en 2022 se implementará de verdad y se verá quien está preparado”. De forma transversal, considera, todo aquello ESG tendrá una prima y quien no siga este enfoque se encontrará penalizado.

Para el próximo año, el director de Inversiones espera un ligero bache en el primer semestre del próximo año por la desaceleración de China y la aceleración de la inflación. Por tanto, comenzarán el 2022 con una exposición limitada al riesgo que se irá recalibrando durante el año.

Tal y como indica de la Morena, se ha pasado de un discurso sobre el repunte temporal de la inflación a uno sobre inflación alta y persistente. Desde su punto de vista, las presiones se mantendrán el próximo año debido a los cuellos de botella del lado de la oferta y el aumento de las presiones salariales.

China es un foco de preocupación para el director de Inversiones. “No tenemos claro donde va a acabar el plan de estabilización”, subraya de la Morena, quien defiende que se trata de un activo para invertir a largo plazo, pero a corto plazo van a infraponderar el activo. “Se busca un crecimiento menos alto, pero de mas calidad y con menos impacto medioambiental. Necesitamos ver que el impacto de un menor crecimiento de China en el mundo se asienta”, contextualiza.

A nivel general, realizarán apuestas de valor relativo y buscarán fuentes adicionales de diversificación que puedan mitigar el riesgo de inflación, como los activos reales. Por otro lado, quieren activar el motor de rentas con multiactivos.

En renta variable van a huir del ultra growth y enfocarse en un sesgo de calidad y value. En medio de unos mayores costes y tipos al alza, considera que la selección debe centrarse en ganancias y capacidad de fijación de precios, la calidad y el valor. A nivel regional, opina que los emergentes estarán de vuelta en el foco por la recuperación de beneficios y el despliegue de las vacunas.

Transiciones

Además del paso de la euforia posterior a la pandemia a la desaceleración, el riesgo de estanflación o los nuevos mandatos de los bancos centrales de mantener la represión financiera, el grupo se fija en otras transiciones que están conduciendo a la desincronización, según la firma. Entre ellas, el paso del liberalismo a la intervención. “La crisis de la Covid 19 ha aumentado la necesidad de luchar contra la desigualdad y poner la salud y los temas verdes en el primer lugar de la agenda política”, señala. Las consecuencias son mayores impuestos y discriminación sectorial, contextualiza.

Por otro lado, piensa que varios factores (desafíos geopolíticos, supremacía energética, tecnología y la necesidad de contar con cadenas de suministro resilentes) van a acelerar una tendencia de acercamiento de la producción a nivel regional.