La inversión bajo criterios ASG sigue en pleno auge y consolidándose en la industria financiera pero sin llegar de forma decidida a los activos alternativos líquidos. Falta mucho desarrollo, también en su regulación, según ponen de manifiesto varios expertos.
La inversión bajo criterios ASG sigue en pleno auge y consolidándose en la industria financiera pero sin llegar de forma decidida a los activos alternativos líquidos. Falta mucho desarrollo, también en su regulación, según ponen de manifiesto varios expertos de entidades en un desayuno organizado por FundsPeople y patrocinado por Amundi, en el que han reclamado también una taxonomía que propicie un cambio de escenario.
Jesús López de La Nieta, responsable de selección de fondos líquidos de Gestión Alternativa de BBVA hace hincapié en el compromiso de todo el banco por la sostenibilidad y detalla que su departamento ha desarrollado una metodología propia interna para evaluar fondos de terceros en términos ASG, cuya piedra angular gira en torno a la verificación de la integración real de elementos ASG en el proceso inversor de un fondo.
La inversión bajo criterios que buscan la excelencia de las empresas con el trato al medioambiente, el cumplimiento de los derechos sociales y el buen gobierno sigue consolidándose en la industria, pero la industria de alternativos líquidos se encuentra aún en un estado incipiente, según pone de manifiesto López de la Nieta, quien, no obstante, asegura que “estamos viendo en los últimos meses avances más que relevantes en ciertas estrategias, especialmente aquellas con una predominancia de inversión de renta variable”.
Desarrollar la taxonomía
También Fernando Sánchez Santidrián, director de Gestión Alternativa de Caixabank AM, reafirma el compromiso de su grupo con el mundo de la sostenibilidad, que cuenta con fondos Artículo 9. “Dentro de arquitectura abierta, hacemos un análisis a doble escala, tanto por el lado de la gestora como del fondo. En el primer caso comprobamos el nivel de compromiso de la entidad en ASG examinando sus políticas ISR, los recursos que emplea, si cuenta o no con un departamento independiente y cómo gestiona las listas de exclusiones, entre otros criterios. Respecto al análisis del fondo, usamos igualmente un doble enfoque: uno cualitativo a partir de una DDQ especifica en ASG interna que nos ayuda conocer en qué parte del proceso de inversión se utilizan criterios ASG de integración y que recursos usan; y otro más cuantitativo, donde tenemos una herramienta externa que analiza todos los fondos -también a nivel cartera-, se sacan los diferentes ratings ASG, y se siguen las posibles controversias y otras restricciones internas”.
En el mundo de los alternativos, Sánchez Santidrián reconoce que se han hecho avances en materia ASG, si bien considera que aún falta mucho desarrollo, también en su regulación. Por ejemplo, echa en falta la existencia de una taxonomía sobre el uso de las posiciones cortas que aclaren su consideración desde el punto de vista ASG.
Asimismo, destaca que hay que analizar el uso de apalancamientos, derivados OTC y las contrapartidas. “Puedes estar haciéndolo muy bien en la cartera, cumplir con todos los requisitos ASG, y no hacerlo, por ejemplo, en los activos colaterales que se usan en derivados OTC”. Asegura también Sánchez Santidrián que la entidad, desde su posición inversora está haciendo una labor activa sobre estos temas para ver cómo pueden avanzar en materia ASG en este ámbito.
Por otro lado, desde Santalucía AM también hace un doble análisis ASG. “Por un lado, trabajamos con un proveedor de datos externo que nos ayuda a analizar las inversiones y que vierte en nuestra política de integración. Por otro, contamos con una due dilligence específica ASG, que se utiliza también para los fondos de retorno absoluto. La combinación de ambas nos permite tanto la selección de producto, como la aprobación de este a través de una política de integración al a gestión”, explica David Sánchez, responsable de Selección de Fondos y Gestión de FdF de Santalucía AM.
La controversia con las posiciones cortas
Sánchez profundiza en el debate acerca de las posiciones cortas en estrategias sostenibles. “Hasta hace poco, las exposiciones cortas no se contemplaban en estas inversiones o se consideraba que no eran adecuadas, pero ahora se defienden más porque crean un mercado más eficiente, generan beneficios y te permiten ser parte de la mejora de las compañías”. La cuestión es, reflexiona Sánchez, si el camino es el adecuado. “¿Por qué no hacer engagement con las compañías en vez de penalizarlas?”, plantea.
Una opción que para José María Martínez-Sanjuán, director global de Selección de Fondos de Santander BP, es mucho más compleja a la par que interesante porque implicaría un plazo muy largo de maduración para ver resultados tangibles y porque “no todo el mundo tiene capacidad para sentarse en los consejos de administración e influir en la toma de decisiones de la empresa”. La labor del engagement es crítica para ver resultados tangibles.
Un abanico de oportunidades para los inversores
Al margen de este debate, para Martínez-Sanjuán, la sostenibilidad y su regulación brindan un abanico de oportunidades a los inversores, que pueden sacar provecho y al mismo tiempo contribuir a un mundo mejor y más sostenible.
En el caso de Santander, “nuestro compromiso es total, creemos en los criterios ASG a la hora de invertir, no solo miramos los fondos que cumplen con la regulación y son Artículo 8 o 9, sino que lo hacemos con aquellos que tienen sellos de reconocido prestigio porque ello supone que han pasado por una serie de procesos donde se ve que efectivamente son sostenibles e integran la sostenibilidad en sus procesos de inversión”. La entidad también cuenta con un equipo de análisis ASG dedicado exclusivamente a analizar estos fondos, las gestoras, sus capacidades y procesos para ver qué estrategias siguen y que criterios implementan, agrega Martínez-Sanjuán.
Nuria Ortega, directora comercial Alternativos Líquidos para Iberia de Grupo Amundi, señala que “el marco de la inversión socialmente responsable se ha desarrollado especialmente para las estrategias tradicionales long only. Aplicar los mismos criterios a la inversión alternativa, que tienes unas características muy específicas, no es tan sencillo, especialmente si lo que quieres hacer de forma seria y consistente”.
“Estamos trabajando con los gestores de cada una de nuestras estrategias para acompañarlos en este proceso, de alineación con los criterios ASG del grupo. Muchos de ellos integran ya criterios extrafinancieros en sus políticas de inversión y contamos con un fondo clasificado como Artículo 8 según SFDR, como es Lyxor / Bridgewater All Weather Sustainability Fund”, añade Ortega.
NOTA para el lector: el desayuno del que parte este artículo se celebró antes de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.