“El peso mexicano está guiado casi por completo por las expectativas, comentarios y tuits de Trump”, afirma Andreas König, gestor del Pioneer Absolute Return Currencies (calificado como Consistentes).
“Bajo nuestro punto de vista, el año estará dominado para las divisas por las políticas, medidas e intenciones del nuevo presidente de EE.UU.”, afirma Andreas König, gestor del Pioneer Absolute Return Currencies (calificado como Consistentes). Un buen ejemplo de este impacto se pudo ver el miércoles, cuando el peso mexicano reaccionó violentamente a la baja durante la primera rueda de prensa de Donald Trump en seis meses, al afirmar el presidente electo que seguía dispuesto a construir el muro para separar la frontera de EE.UU. con México. Según el gestor de Pioneer Investments, “lo más probable es que en el primer semestre influyan más las medidas y después influya más el impacto sobre la economía que le seguirá”.
El experto aclara sobre el comportamiento del dólar que “los participantes del mercado cambiaron significativamente sus expectativas sobre las posibles subidas de tipos en EE.UU. desde las elecciones, por lo que ya se ha puesto mucho en precio por esta parte”. A esto añade otro impacto muy significativo: “Un dólar fuerte típica e históricamente supone un contexto difícil para las divisas emergentes en general, pues la financiación en dólares se vuelve más cara y muchos países están endeudados en dólares. Con esto en mente, los países con un endeudamiento alto en divisa extranjera, equilibrios negativos o dicho de forma general, con una fuerte dependencia de la financiación en dólares y de los flujos de capital, están más en peligro que aquellos que tengan buenos fundamentales económicos”.
König vaticina la prolongación de la influencia del Brexit sobre la libra, “debido a los debates y la decisión de activar el Artículo 50 y la negociación de acuerdos comerciales”. No obstante, observa que “cada vez hay más divisas con eventos o temas específicos asociados que están ganando atención”. Por ejemplo, cree que el euro reflejará la incertidumbre asociada al calendario electoral en la zona euro (con comicios en Holanda, Alemania y Francia). Otros temas a tener en cuenta serán la manera en que refleje la lira los cambios políticos en Turquía, o el impacto sobre la corona sueca de un eventual cambio en la política monetaria de su banco central.
Perspectivas y posicionamiento
König detalla a continuación las perspectivas con las que trabajan él y su equipo para operar en el mercado de divisas. Comienza explicando su visión sobre el peso mexicano: “Está guiado casi por completo por las expectativas, comentarios y tuits de Trump, qué medidas puede o no ejecutar”. El fondo no presenta exposición a esta moneda porque “hay demasiada incertidumbre relacionada con Trump en el precio”. Advierte a los inversores que “es demasiado pronto todavía para ir en contra del momento”.
En cambio, está corto en yuanes “mientras que veamos flujos de capital saliendo de China y un posible deterioro de las relaciones comerciales entre EE.UU. y China”. Aunque el gestor cree que las autoridades chinas “seguirán influenciando a los mercados e intentando limitar la volatilidad”, espera que en las próximas semanas se vea “un mercado más lateral, especialmente en torno a las fiestas chinas”.
Sobre el dólar, el gestor añade a lo expuesto anteriormente que “en el corto plazo hay un riesgo de corrección, porque el posicionamiento en dólares está muy centrado sólo en un lado y se han puesto en precio muchas expectativas positivas”. Para el largo plazo, cree que el “billete verde” seguirá estando apoyado por “los diferenciales de tipos, la divergencia monetaria y posibles medidas fiscales de la nueva Administración”. König advierte finalmente que, en caso de implementarse finalmente, “en el largo plazo las estrategias proteccionistas históricamente han terminado por debilitar a la moneda”.
En cuanto a la libra, explica que “sin el Brexit y su carga política, la divisa estaría claramente infravalorada. Pero es muy difícil decir dónde podrá tocar suelo al incluir esas incertidumbres, porque no hay ninguna situación histórica comparable”. Lo único que ve claro es la moneda seguirá cargando con el lastre de los déficits gemelos, los flujos de salida de capital y la continuación del desapalancamiento. Por tanto, sigue estando negativo en la divisa y no tiene ninguna exposición a la moneda británica en cartera.
El Pioneer Absolute Return Currencies logró resultados especialmente buenos durante el último trimestre de 2016: “Tomamos beneficios en un montón de posiciones hacia final de año porque alcanzamos los niveles de recogida de beneficios, pero también porque esperábamos que cayera la liquidez y que posiblemente se produjeran movimientos erráticos y aleatorios hacia final de año”. El fondo ha empezado 2017 con baja exposición al riesgo (sólo una quinta parte de su presupuesto de riesgo); el equipo está analizando los temas que están marcando el comienzo de año para reposicionar la cartera. König indica que todavía está largo en dólares frente a yuanes y rands sudafricanos, que está corto en liras turcas frente al euro y largo en coronas suecas frente al euro.
Tendencias para 2017
Una vez expuestas sus perspectivas para estas divisas, el representante de Pioneer efectúa una advertencia: “No pensamos que haya muchas tendencias claras y en una dirección sobre estos temas, porque ya se ha puesto mucho en precio y los mercados están vigilando muy de cerca estos temas”. En su opinión, los inversores afrontarán “un entorno en el que las noticias y los titulares muevan a los mercados”, por lo que predice “movimientos erráticos de amplio rango”. En este contexto, el gestor declara que “un acercamiento flexible con un posicionamiento disciplinado y gestión del riesgo volverán a ser clave”.
Amén de cambios en los fundamentales, el gestor también ha notificado un cambio en los factores técnicos. Los atribuye a la búsqueda de rentabilidad en instrumentos líquidos ante la extensión de los tipos negativos en renta fija: “Las divisas se volvieron cada vez más interesantes y populares en 2016, como una clase de activo alternativa y una fuente atractiva de alfa”. La tendencia será similar en 2017: “Renta variable y renta fija todavía están cerca de máximos. La liquidez de algunos instrumentos es realmente un problema y la búsqueda de alternativos líquidos mantendrá a las divisas como un bloque necesario para formar parte de muchas carteras y fondos”, concluye.