Para el gestor del NB Short Duration Euro Bond, el ensanchamiento de los diferenciales que ya hemos visto es significativo. La lectura positiva es que los bonos a corto plazo han cumplido su papel y han ofrecido una mejor protección que los de largo plazo.
Ha sido un shock para los mercados. Antonio Serpico, gestor del NB Short Duration Euro Bond, es sincero al valorar los acontecimientos de las dos últimas semanas: los inversores, él incluido, no estaban preparados para la severidad de los aranceles anunciados por Estados Unidos el pasado 2 de abril. “No esperábamos estos niveles de aranceles, ni mucho menos la fórmula sobre la que se calcularon”, reconoce. Y así lo interpretaron también los mercados en su primera reacción. “Las bolsas corrigieron con la misma intensidad que vimos durante los primeros días de la pandemia o cuando ocurrió el 11-S”, apunta.
Durante las primeras sesiones, la renta fija actuó como activo refugio frente a las caídas generalizadas de la renta variable, pero tras varios días de volatilidad, incluso los bonos terminaron por resentirse. “Cuando eso ocurre, es señal de que los inversores están entrando en pánico, porque no hay liquidez. Todos quieren vender y nadie quiere comprar. Por eso vimos movimientos tan bruscos”, explica el gestor.
Cómo resistió la parte corta de la curva
La mañana en la que nos sentamos con Serpico, los mercados respiraban con algo más de calma tras diez días de intensa volatilidad. A medida que la negociación entre los grandes bloques parece seguir abierta, el gestor deja una reflexión interesante sobre el comportamiento de la parte corta de la curva durante la corrección: la curva se empinó. Esto significa que, como era previsible, tener bonos a corto plazo protegió mejor a los inversores que la parte larga. “Compensó parte de las pérdidas derivadas del ensanchamiento de los diferenciales en crédito corporativo”, señala.
Para Serpico, este comportamiento es una buena noticia porque confirma el papel de la renta fija en una cartera: ofrecer descorrelación en tiempos de volatilidad y, en el caso del papel a corto plazo, una mayor protección. En cambio, los vencimientos más largos están sufriendo por las muchas dudas de los inversores: qué impacto tendrá el plan de estímulos fiscales de la Unión Europea, cómo influirán las relaciones políticas en la asignación de activos, etc. “En el mercado se comenta que parte de los movimientos que hemos visto en el tramo largo de la curva del Tesoro estadounidense podrían estar relacionados con desinversiones por parte de inversores chinos”, añade.
Movimientos en el NB Short Duration Euro Bond
Superadas las primeras semanas de volatilidad, el mensaje que transmite Serpico es de oportunismo. “El movimiento que ya hemos visto en los spreads es material. No estamos lejos del nivel que descontaría un entorno de bajo crecimiento o incluso una recesión leve”, afirma. Por ejemplo, el crédito europeo con grado de inversión ha corregido entre 40 y 45 puntos básicos; el high yield europeo, entre 120 y 130 puntos básicos.
Y aunque el escenario base del equipo gestor se ha revisado a la baja, no contempla aún una recesión grave. “A principios de año estimábamos un crecimiento del 2% para Estados Unidos, y ahora creemos que será más bien del 1%, o incluso cercano a cero si se mantienen estos aranceles duros”, reconoce.
Así, en el NB Short Duration Euro Bond, que cuenta con el Rating FundsPeople 2025, están aprovechando poco a poco la corrección. “Tras el castigo indiscriminado en los valores cíclicos, vemos valor en algunos nombres del sector retail, fabricantes de automóviles y componentes, así como en inmobiliario”, comenta. En la parte táctica de la cartera, que representa como máximo un 20%, están añadiendo algo de high yield de forma marginal.
Esta combinación de una gestión muy activa, junto con el foco en la preservación de capital (la volatilidad ex ante está limitada al 1%), es para Serpico la clave de los dos buenos ejercicios consecutivos que acumula el fondo. Tras cerrar 2024 como líder entre sus comparables, en 2025 se mantienen de nuevo en el primer decil de su categoría.