Bill Gross predice que 2015 será el final del mercado alcista de renta fija

Bill
PIMCO

A pesar del cambio de gestora y del cambio en la estrategia esencial del nuevo fondo, Bill Gross no ha abandonado algunos de sus viejos hábitos. Quizá el más conocido para el gran público sea su costumbre de servirse de los medios de comunicación e internet para lanzar mensajes incendiarios. Esta vez, la plataforma que ha utilizado para transmitir su visión sobre la renta fija en 2015 ha sido la web de Janus Capital, donde publica un comentario mensual sobre el mercado. 

La última entrada es especialmente relevante porque ofrece las líneas generales del modus operandi que Bill Gross piensa adoptar en este año que acaba de empezar. El “rey de los bonos”, fiel a su estilo directo, va con la verdad por delante: “Tenga cuidado con los idus de marzo, o si vamos al caso, con los idus de cualquier mes de 2015. Cuando el año acabe, habrá signos negativos en el frente de muchas clases de activos. Los buenos tiempos han terminado”. 

No es, sin embargo, la primera vez que Gross lanza este mensaje. Lo afirmó sin ir más lejos hace siete meses, en mayo del año pasado. Entonces no sólo predijo que iba a terminar el mercado alcista de renta fija, sino que auguraba sólo retornos del 3%. Hay también precedentes anteriores a esa fecha: así lo recoge por ejemplo la entrada a uno de los blogs del Wall Street Journal, con fecha del 10 de mayo de 2013. De hecho, algunos medios han especulado con la idea de que una de las razones por las que el gurú de la renta fija abandonó PIMCO para guiar una estrategia de inversión en deuda sin limitaciones de ningún tipo en Janus Capital ha sido precisamente movido por su creencia de que en el futuro será más difícil generar retornos respetables en esta clase de activo. 

El propio Gross no duda en admitir este fallo en sus cálculos, y de paso aprovecha para meter un dedo en el ojo a una buena parte de la industria: “Poner fecha al final de un mercado alcista es casi siempre una tarea imposible, y es una razón por la que muchos observadores del mercado no lo hacen. La otra razón es que muchos inversores son optimistas con la experiencia histórica o simplemente por naturaleza humana, y nunca apoya a sus intereses pronosticar una caída en los precios del producto que venden”. El inversor reivindica que “va a llegar un tiempo en el que el sentido común deberá reconocer que el emperador no tiene traje, o al menos que está en calzoncillos. Ahora es el momento”.

¿Por qué van a caer los retornos?

El gestor denuncia que, a lo largo de los últimos 30 años, los inversores se han acostumbrado a un mercado que no ha parado de subir y que siempre ha contado con el salvavidas de los bancos centrales en momentos de estrés. Sin embargo, ha llegado a la conclusión de que los tipos ultrabajos ya no están generando suficiente crecimiento económico: “Mientras que tales rentabilidades dan como resultado casi automáticamente precios más elevados de los bonos y una escalada de los PER, su efecto sobre el crecimiento real se difumina o, en algunos casos, se revierte”. 

Gross habla de un efecto “Alicia en el País de las Maravillas”: con tipos cero, las expectativas de retorno económico (ROI) y retorno financiero (ROE) “se están limitando a niveles cada vez más bajos”, porque el sector privado cada vez es más reticente a utilizar el dinero que le han dejado sus acreedores, porque la economía real aún no presenta suficiente demanda agregada. “Hacer dinero financiándose a coste cero para invertir en la economía real parece pan comido. Pero viene con un riesgo creciente en un entorno de estanflación secular, incertidumbre en la demanda y con un ROI cercano a cero que los emprendedores están dispuestos a soportar”, advierte el experto.  

Estos razonamientos llevan a Gross a concluir que “el milagro del superciclo de la deuda llega a un final lógico cuando las rentabilidades, las valoraciones y la creciente cantidad de deuda ponen una carga poco razonable sobre la ecuación rentabilidad/riesgo. Muy poco retorno para demasiado riesgo. A medida que la economía real de los países desarrollados y emergentes renquea, también acabarán haciéndolo los mercados financieros”. ¿Les suena esta situación? 

El “rey de los bonos” aprovecha este punto para realizar otra predicción: “Si no se puede normalizar el crecimiento real en muchas economías desarrolladas y altamente apalancadas a tipo cero, entonces los inversores al final buscarán refugios alternativos. No de forma inmediata, pero con el cambio más mínimo, la deuda y los activos se cambian por dinero figurado y a veces por dinero real para guardar bajo el colchón. A medida que sucede, el sistema se desapalanca, a medida que el efectivo de los activos reales se vuelve la posición más deseable”.  

En este punto aprovecha para criticar la actuación de los bancos centrales, otro de los sellos distintivos en el discurso de este gestor: “Los bancos centrales, con sus modelos históricos, aún no han comprendido la impotencia de la creación de crédito sobre la economía real a tipos cero. Sin embargo, cada vez es más obvio que las rentabilidades se acercan más y más a cero, el crédito cada vez se comporta más como el cash y pierde su poder multiplicador de expansión monetaria para el que el sistema de reserva fraccional fue diseñado”. En conclusión: “Se desalienta la inversión más que estimularla debido a los decrecientes ROI y ROE”. 

¿Dónde invertir?

Para Gross, se ha roto el mecanismo de financiación a la economía real, y una de las consecuencias más graves de esta rotura es la penalización a los ahorradores: “Las rentabilidades se vuelven demasiado bajas para los ahorradores para satisfacer sus necesidades”. El consejo que les da el flamante nuevo gestor de Janus Capital para poder afrontar este entorno incierto es invertir en activos de alta calidad con flujos de caja estables, lo que para él incluye a los treasuries, los bonos de empresas de alta calidad y las acciones de empresas poco apalancadas que paguen dividendos atractivos y cuyas fuentes de ingresos estén diversificadas tanto operacional como geográficamente. “Sea precavido y conténtese con retornos bajos en 2015. El tiempo para tomar riesgos ha pasado”, es el consejo final de Gross a los inversores y ahorradores. 

Puede consultar aquí el texto completo con las previsiones de Bill Gross para 2015.