Doce años después de que se creara el bitcoin, la criptodivisa está empezando a llamar la atención de las grandes gestoras de fondos. La primera ha sido, además una de las mayores del mundo, BlackRock, quien ha comunicado a la SEC la inclusión del bitcoin dentro del universo elegible de inversión de dos de sus fondos: BlackRock Funds V (incluye BlackRock Strategic Income y BlackRock Emerging Markets Flexible Dynamic Bond Portfolio) y BlackRock Global Allocation Fund. Solo el segundo está disponible para el inversor español y, de hecho, cuenta con el Sello FundsPeople 2020 por su calificación de Blockbuster.
En ambos, ha incluido en la documentación que ha mandado a la SEC este párrafo: “Cada fondo puede utilizar instrumentos denominados derivados, que son instrumentos financieros que obtienen su valor de uno o más valores, productos básicos (como el oro o el petróleo), divisas (incluido el bitcoin), tipos de interés, acontecimientos crediticios o índices (una medida del valor o de los tipos, como el índice S&P 500 o el tipo de interés preferencial para préstamos). Los derivados pueden permitir que un Fondo aumente o disminuya el nivel de riesgo al que está expuesto de manera más rápida y eficiente que con otras transacciones”.
Esto implica que podrán invertir no en bitcoin de forma directa sino en derivados de bitcoin con el objetivo de cubrir su cartera. Es decir, productos regulados y que que cotizan en el mercado de futuros de Chicago.
La fiebre del bitcoin
La decisión de BlackRock se produce justo en un momento en el que la demanda de bitcoin está disparada. De hecho, según la última encuesta de Bofa Securities, estar largos de bitcoin es la apuesta más sobrecomprada para los gestores de fondos. Quizá ello tenga que ver que comenzara el año marcando nuevos máximos históricos, aunque luego asistiera a pérdidas del 20% haciendo honor a esa alta volatilidad que siempre ha tenido la criptodivisa . De hecho, es uno de los activos que más disparidad muestran a la hora de establecer previsiones. Por ejemplo, solo para 2021, las estimaciones oscilan entre la barrera de los 50.000 dólares de la que hablan los analistas de Bloomberg a los 300.000 dólares que no descarta Citibank.
