BNP Paribas Asset Management ha ampliado su gama de inversiones temáticas sostenibles con el lanzamiento de un ETF basado en la economía azul. El producto complementa el ETF basado en la economía circular lanzado en mayo de 2019. El BNP Paribas Easy ECPI Global ESG Blue Economy UCITS ETF invierte en aquellas empresas de los mercados desarrollados de todo el mundo que están mejor posicionadas para aprovechar las oportunidades que ofrece el uso sostenible de los recursos oceánicos. EL vehículo, de réplica física, cotiza en Xetra y Euronext Paris y su ratio total de gasto es del 0,30%. “El Banco Mundial define la economía azul como el uso sostenible de los recursos oceánicos para el crecimiento económico, la mejora de los medios de vida y el empleo, y la salud del ecosistema oceánico”, explican desde la gestora.
El nuevo ETF replica un índice de ECPI, proveedor de índices especializado en criterios ASG con 20 años de experiencia, cuya metodología se basa fundamentalmente en los criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo de las compañías cotizadas en los mercados de todo el mundo. Las compañías se seleccionan por su participación en la economía azul y se clasifican en cinco categorías: medios de vida costeros (protección, ecoturismo), energía y recursos (energía eólica marina, biotecnología marina, energía mareomotriz), pesca y mariscos, reducción de la contaminación (reciclaje/gestión de desechos, servicios ambientales) y transporte marítimo. Se trata de un índice ponderado de forma equitativa y está compuesto por 50 empresas con una calificación ASG positiva y con la mayor capitalización de mercado de su categoría. Quedan excluidas aquellas compañías implicadas en violaciones sistemáticas del Pacto Mundial de las Naciones Unidas y en la fabricación de armas, así como aquellas que obtienen más del 10% del tabaco, la extracción de carbón térmico o las fuentes no convencionales de petróleo y gas.
“El ecosistema del océano tiene características y recursos que son esenciales para nuestro bienestar y para la prosperidad de la economía mundial, aunque su sostenibilidad está actualmente en peligro. Ya estemos hablando del empleo turístico o de la energía eólica marítima, el océano constituye una formidable reserva de biodiversidad que hemos de preservar a toda costa para mantener nuestra seguridad alimentaria y nuestra propia salud, así como para proteger las áreas costeras. También es uno de nuestros mejores aliados en la lucha contra el cambio climático, ya que captura casi el 30% de las emisiones de CO2 producidas por la actividad del hombre”, declara Robert-Alexandre Poujade, analista de criterios ASG del Centro de Sostenibilidad de BNP Paribas Asset Management.