David Leduc, director de inversiones de Standish, filial de BNY Mellon IM, explica las distintas soluciones de renta fija que ha diseñado la gestora para sus clientes
¿Cómo se va a gestionar la renta fija en el futuro? David Leduc, director de inversiones de Standish, filial de BNY Mellon IM, dio algunas claves en un evento celebrado recientemente en París por la gestora. “Lo importante es cómo estás asignando los activos de renta fija dentro de la cartera, hay que aprovechar las distintas herramientas de las que dispones para reducir el riesgo”, resume.
Funds People ha tenido la ocasión de poder hablar con Leduc del presente y el futuro de esta clase de activo. Para él, el acercamiento será cada vez más oportunista, más flexible y más activo para acceder a todas las oportunidades que ofrezca el mercado. “Excepto en entornos donde hay una elevada correlación, existen mercados en los que siempre hay algo que hacer dentro del universo de renta fija. Los inversores deberían buscar la máxima diversificación”, afirma Leduc. “No se trata de lograr una distribución perfecta en términos sectoriales o regionales, sino que el gestor disponga de la flexibilidad necesaria para generar alfa si cambia el escenario”, añade.
Leduc descarta que se esté produciendo la tan anunciada gran rotación. Todo lo contrario. “La mayoría de la demanda histórica de los inversores se centra en la renta fija. También se deben tener en cuenta los cambios demográficos y la obligación de inversores institucionales como los planes de pensiones de comprar renta fija por sus políticas de inversión”. Su postura es que la demanda por los bonos se mantendrá estable. “Sí que se ha producido un cierto trasvase de renta fija a renta variable, pero no creo que se produzca una gran rotación”, concluye.
Las estrategias de Standish
“La gestión activa es absolutamente crítica para conseguir lo que quieren los inversores para sus carteras”, enfatiza Leduc. El director de inversiones de Standish insiste en vigilar muy de cerca qué está sucediendo en los mercados para poder dar una respuesta lo más rápida posible: “En el entorno actual, la mayoría de los activos de renta fija están cerca de las medias históricas”, señala el experto. Es el caso del high yield, los spreads se han reducido de tal manera que, en el caso de las emisiones estadounidenses, los diferenciales con respecto a los treasuries ya se sitúan por debajo de los 400 puntos básicos. “No es una trampa de valor: creo que esta clase de activo se ha beneficiado del actual entorno de bajos tipos de interés. Pero sus primas no son atractivas en relación con otros activos; en mi opinión, está sobrevalorado”, señala el experto. Aún así, este considera que aún hay algo de margen para que los diferenciales de la deuda de alto rendimiento puedan estrecharse.
¿Y dentro del grado de inversión? El experto indica que la deuda corporativa con grado de inversión ha alcanzado su valor razonable en muchos mercados, aunque sus fundamentales siguen siendo fuertes. En este universo, desde Standish muestran preferencia por la deuda denominada en dólares antes que en euros, con sobreponderaciones en los sectores de banca, metales y mineras y REITS e infraponderaciones en tecnología, salud, aeroespacio y defensa y compañías de wireless.
Leduc completa sus perspectivas para el universo de deuda corporativa al comentar que en los mercados de deuda corporativa hay margen para obtener retornos entre 100 y 120 puntos básicos por estrechamiento de los diferenciales, aunque considera que ya queda poco margen para generar valor con esta estrategia. En términos generales, el representante de Standish cree que los diferenciales corporativos guardan más atractivo que los soberanos.
Dentro de la renta fija soberana, Leduc señala que su escenario base es que el bund alemán alcance un rendimiento del 2,25%, por lo que los retornos totales que generará serán negativos, del -6,8%. En Standish también tienen posiciones en deuda soberana de la Península Ibérica. “La razón por la que invertimos en España y Portugal es por la mejora de sus economías, por las reformas, y por el desapalancamiento de la deuda. Su perfil de sostenibilidad ha mejorado también por el descenso de los costes de financiación y han entrado en un ciclo virtuoso, aunque haya sido gracias a Draghi”, explica Leduc. Añade a renglón seguido que “aún así todavía hay necesidad de reformas. Italia todavía tiene camino por recorrer, también Francia y Grecia. No encontré justificada la rentabilidad que ofrecían los bonos griegos (en referencia a la reciente emisión de deuda a cinco años) por el elevado endeudamiento griego”.
En cuanto a la renta fija emergente, el director de inversiones no duda en hacer la siguiente declaración: “Hay mucho valor en los emergentes, y son mercados que me gustan mucho. En divisa local es de lo más barato, pero no lo puedes comprar todo. Se debería tener renta fija emergente en cartera pero siendo selectivos, la selección de emisiones es absolutamente crítica por su heterogeneidad”. Dentro de la renta fija emergente denominada en divisa fuerte, el equipo de Standish sobrepondera en deuda de México . En divisa local, cuentan con ‘papel’ de Colombia, Brasil, México y Perú.
Carteras a medida
En la actualidad, Standish ha desarrollado para sus clientes bajo el concepto ‘renta fija oportunista’ un paquete de soluciones distintas en función de la visión del mercado y del riesgo percibido dentro de renta fija con las que buscan generar retornos positivos con independencia del ciclo económico que esté atravesando el mercado, por lo que también se definen como agnósticos respecto al índice. En cada una de las estrategias se toman decisiones que tienen en cuenta la asignación por sectores, países y emisiones, la asignación de divisas, la volatilidad y los tipos de interés (posicionamiento por duración y en curvas, interés nominal frente a interés real)