Convertibles y high yield, oportunidades ante el desafío de los bajos rendimientos para BNP Paribas WM

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En este entorno de tipos bajos es complicado no recomendar a un cliente conservador activos que no tengan componente de riesgo. Partiendo de esa base, Silvia García-Castaño, directora de Inversiones de BNP Paribas Wealth Management, ante el desafío de los bajos rendimientos, ve como oportunidades de inversión en renta fija a los bonos convertibles y los bonos corporativos high yield.

Estas son las dos ideas de inversión para diversificar el grueso de la cartera en renta fija, actualmente en duraciones bajas, en emisiones principalmente europeas y de deuda corporativa. En su caso no apuestan por fondos de retorno absoluto de renta fija ya que, “aunque los haya muy buenos y por muy flexibles que sean, el entorno está complicado para obtener alfa en el activo”, destaca García-Castaño.

¿Por qué le gustan los convertibles? Esta idea se justifica en que son positivos en bolsa europea -posibilidad de participar en ella con un riesgo de caída más limitado-, las valoraciones por la caída de volatilidad son atractivas -esperan que suba la volatilidad, mejor para el precio de las opciones- y las perspectivas para el crédito son favorables -confian que los diferenciales se mantengan estables por unas tasas de impago bajas-. Además, añade, su duración no es demasiado alta, lo que ofrece una reducida sensibilidad a una subida de tipos. Recomiendan centrarse en emisiones europeas y ser selectivos.

En high yield, García-Castaño piensa que también brinda mayores oportunidades el europeo, donde no existe el riesgo específico del sector energético de EE.UU. Con el soporte de los bancos centrales y los balances empresariales más sólidos, “no vemos que vaya a incrementarse las tasas de impago”, subraya. Asimismo, resalta que la duración del activo cada vez es menor.

Respecto al americano, hasta que no haya estabilidad en las materias primas no considera que sea momento de entrar, aunque presente valoraciones interesantes. “El reciente aumento de los diferenciales sugiere que el riesgo esté bien remunerado”, indican. Por ello, vuelve a recalcar, “esperamos que los precios del petróleo aumenten en el próximo año -entre los 45/60 dólares- y esto debería limitar los riesgos de un fuerte aumento en las tasas de impago”. En todo caso, recomiendan evitar las emisiones del sector de la energía.

En cuanto la aproximación a renta variable, para un inversor defensivo buscan la generación de ingresos estables a través de dividendos crecientes y REIT europeos. Recuerdan que para generar dividendos crecientes las empresas necesitan generar ingresos y flujos de caja sostenibles, lo que implica ser competitiva y posicionarse como líder en su sector. Por tanto reúnen cualidades propias de las compañías de alta calidad: ser más resistente en las caídas de mercado y conseguir mejores resultados a largo plazo.

En este sentido, recomiendan centrarse cada vez más en compañías cíclicas con dividendos crecientes ya que su diferencia de rentabilidad respecto a las compañías con dividendos muy defensivos ha alcanzado un nuevo máximo. “Los REIT europeos forman parte de esta selección”, señala, además de insistir en que la mayoría de estas empresas están aumentando sus dividendos cada año. Según BNP Paribas WM, la rentabilidad media por dividendo de los valores inmobiliarios en Europa es del 5%, una tasa considerablemente más alta que los retornos de los bonos alemanes a 10 años. 

La última temática para un inversor más conservador son las soluciones flexibles. Dentro de ellas entran las estrategias long/short, por su potencial por el entorno de dispersión que existe entre los distintos sectores y por no estar ligados a los tipos de interés; y las estrategias macro. Éstas, explica, se pueden beneficiar de una mayor visibilidad respecto a las intervenciones de política monetaria de los bancos centrales y jugar las significativas anomalías actuales. En un tipo de estrategia y otra inciden en la importancia de elegir vehículos consolidados y solventes con una trayectoria reconocida. Por otro lado ven también atractivos a los productos estructurados.

Sugerencias para inversores equilibrados y dinámicos 

Para inversores equilibrados y dinámicos encuentran muchas oportunidades en el terreno de la renta variable. Desde comprar valores cíclicos y value para aprovechar la recuperación de la zona euro, hasta invertir en mercados emergentes de forma selectiva (economías que se beneficien de la caída de las materias primeras y con estabilidad política, condiciones que reúnen países del norte de Asia o India). Incluso en Japón, donde aunque esperen crecimientos de la economía a ritmos bajos, creen que los beneficios empresariales subirán fuertemente apoyados en una mejora de las exportaciones y el consumo, gracias al debilitamiento del yen.

Finalmente la firma apuesta de forma residual por otras cuatro ideas novedosas: acceder a empresas con un fuerte componente de innovación digital (robótica, medicina a distancia…) a través de fondos especializados en ello, aprovechar la ventaja relativa de compañías que sobreviven a la rápida aparición de nuevos competidores por su mayor control a la hora de fijar precios (como puede ser el caso de Apple o Richemont), invertir en compañías en transformación (historias de reestructuración o de estrategias expansivas), o tomar exposición a valores socialmente responsables.