Del risk control al risk management

16_pequena_grupo
Funds People

La revolución tecnológica ha impactado en prácticamente todos los ámbitos de la sociedad, también en las gestoras de fondos, y en sus departamentos operativos y de administración. Responsables de estas tareas cuentan en un desayuno organizado por Funds People y patrocinado por SimCorp cómo ha sido la evolución y sus acicates.

Sergio Fernández-Pacheco, director Financiero y de Operaciones de Azvalor AM, considera que, desde el punto de vista de los sistemas, lo más destacado de la evolución de los últimos años es la integridad, el hecho de contar ahora con soluciones globales que se adecúan a cada geografía. “Hace años lo que había es una especie de amalgama de diferentes aplicativos, y ahora contamos con soluciones, como la que ofrece SimCorp. Estos proveedores se han dado cuenta del valor añadido que tiene para el usuario poner a su disposición un modelo integrado lo más completo posible, que proporcione, por un lado, facilidad de uso; y por otro, calidad de la información e integridad de los datos, algo que es vital”.

La publicación de la Circular 6/2009 sobre control interno de las sociedades gestoras de instituciones de inversión colectiva y sociedades de inversión impulsó esta evolución, según explica Ramón Cardil, COO de Trea AM.  “Las gestoras tuvieron que rehacer los modelos que tenían en ese momento y orientarse hacia sistemas integrados porque, si no lo hacían, era imposible gestionar las exigencias de la regulación; y hoy en día, con las nuevas normas, sería imposible”. Además, destaca que las entidades están muy centradas en el risk control guiadas por la normativa, “y yo creo que debemos evolucionar hacia el active risk management. No nos podemos quedar en el control de riesgos; esa parte ya la conocemos y lo hacemos bien, se trata de incorporar el riesgo en la toma de decisiones”.

La Circular 6/2009 afecta a tres ámbitos del control interno: cumplimiento normativo, auditoría interna y control de riesgos. Javier Muñoz, director general de Tressis Gestión, explica que los dos primeros los supervisan y aprueban los consejos de administración, y hay equipos que se encargan de ello o se delega alguna función. En el caso del control de riesgos, en concreto de las IIC, comenta que “se ha paquetizado más y con el tiempo se han ido incorporando mayores obligaciones de realización de informes, fichas…”. Y ha detectado que, a su vez, esta evolución es también una herramienta de venta. “Cuando tienes, por ejemplo, que presentar un fondo a un inversor institucional, como un fondo de pensiones, acudir con el informe de control de riesgos, el performance atribution, ayuda bastante. El inversor lo va a pedir en su proceso de due diligence y de análisis del fondo”. En este sentido, afirma que la gestora ha realizado un gran esfuerzo por publicar informes con contenidos de calidad.

Laura Eguren, directora de Administración y Medios de Imantia Capital, coincide en destacar que el inversor cada vez da mayor importancia a todo lo relacionado con el control de riesgos: “Ya no se trata solo del control de la CNMV, sino que al final se está buscando que se haga lo que el sector bancario lleva haciendo los últimos cinco años, un verdadero risk management”.

Muchas de las nuevas obligaciones de las gestoras, que complican el trabajo diario de los departamentos operativos y de administración, proceden de la nueva regulación MiFID II. Eneritz Rodríguez, miembro del Departamento de Control de Riesgos de Orienta Capital, reconoce que en el caso de su gestora la adaptación a la nueva regulación ha sido ardua. “Tenemos fondos propios y, además, distribuimos diferentes fondos de inversión a través de distintos proveedores, por lo que hemos tenido que realizar el análisis de todas las clases de fondos de inversión y adaptarnos a los nuevos servicios. Sí que nos ha afectado porque, al final, hay que concretar más qué producto puedes ofrecer a cada cliente y bajo qué servicio”.

Francois Thaury, senior sales and account manager de SimCorp, analiza la evolución de las herramientas de control de riesgos desde el punto de vista del proveedor de sistemas de gestión de inversiones y prestaciones para empresas de servicios financieros. Explica que uno de los riesgos que sus clientes buscan mitigar, es el de mercado. “Nos han pedido, sobre todo, que les ayudemos a tener un mejor servicio para las órdenes. Una de las soluciones que les proporcionamos es la de la elaboración de pruebas de estrés”.

Un segundo riesgo es el operacional. En este ámbito, comenta que trabajan junto con sus clientes para hacer el proceso de front a back más rápido, con datos precisos, y con total transparencia. “El front office utiliza el mismo idioma que el back office, ambos tienen la misma información de los componentes del fondo. Por tanto, contribuimos a reducir el riesgo operacional, lo que es muy importante para el cliente”.