Dentro del DPAM Equities Europe Sustainable: un fondo sostenible para batir a la bolsa europea

Tom Demaecker. Foto cedida (DPAM)

El DPAM Equities Europe Sustainable es el vivo ejemplo de que la inversión sostenible no es incompatible con generar rentabilidad. De que se puede batir al índice siendo ASG. El fondo de DPAM se ha batido frente al índice tradicional de bolsa europea, el MSCI Europe, y ha salido victorioso los últimos seis años de manera consecutiva. E incluso a sus compañeros de categoría. A tres y cinco años se sitúa en el primer percentil de los fondos de RV Europa Cap. Grande Blend.

Así, no es de extrañar que el fondo cuente con el  Sello FundsPeople 2021 tanto por su calificación de Blockbuster como de Consistente. Para Tom Demaecker, cogestor del fondo, el equipo es casi tan relevante como el proceso de inversión. A los mandos de la estrategia están cuatro gestores con más de 10 años de experiencia cada uno. Estos guardianes del proceso, como los define Demaecker, se apoyan en nueve analistas sectoriales.

El objetivo del equipo se resume en encontrar compañías de calidad, con alto crecimiento y alta rentabilidad. Demaecker insiste: su meta son negocios robustos. “Si en un sector surge una compañía que está creciendo mucho y muy rápido es natural que surjan muchísimos competidores. Por eso es tan crucial que sean un buen negocio. Que tengan un valor añadido fuerte que les permita hacer frente a la competencia”, explica. El fondo se compone de empresas europeas con potencial para seguir creciendo en cinco, 10 años o incluso durante décadas.

Proceso de inversión del DPAM Equities Europe Sustainable

Tal y como su propio nombre indica, la ASG está completamente integrada en el proceso de inversión. El equipo no cree en la exclusión o los filtros cuantitativos sino en analizar la ASG como parte del análisis fundamental. Más allá de eso, opera como un fondo de renta variable europea al uso.

La cartera del DPAM Equities Europe Sustainable parte de una visión top-down. El equipo primero identifica las temáticas que mueven el mundo, aquellas áreas de crecimiento a la que quieren estar expuestos. Son temáticas como el consumo en emergentes o la digitalización.

La segunda pata es bottom-up. Se pasa en elaborar un mapa de la cadena de valor de dichas temáticas. A partir de ahí, y con la ayuda de los analistas sectoriales, eligen a qué parte de la cadena quieren estar expuestos. En Europa, el universo resultante se compone de 150 valores. De ahí, el equipo selecciona unas 50 ideas para que entren en cartera.

Y aquí encontramos uno de los puntos diferenciales de la estrategia. Todas las posiciones en cartera se reparten equitativamente, entre un 1 y 3%. El fondo busca explícitamente una diversificación. “No somos insiders. Trabajamos en una industria donde no siempre se disponen de todos los datos que nos gustaría. Siempre hay riesgo”, explica Demaecker.

El gestor no lo interpreta como cortar las alas a sus ideas ganadoras. Más bien, de asegurarse de que todas las ideas que entran en cartera son sus mejores ideas. “Hay algunos fondos que tienen importantes pesos en sus máximas convicciones y luego el resto de sus carteras son relleno para diversificar. Nosotros somos todo lo contrario”, defiende el gestor. En su opinión, es uno de sus puntos fuertes. Eliminan de la conversación el debate sobre el peso en cartera y se centran en lo importante: si una empresa debe entrar o no.

Además, se fondo busca siempre tener un equilibrio entre exposición a sectores defensivos y cíclicos. La cartera puede moverse hacia un lado de la balanza u otro, pero siempre a los márgenes. “No somos un fondo growth. Buscamos las oportunidades donde las haya”, insiste Demaecker. Un ejemplo de ello es la evolución de la cartera en los últimos 12 meses. Durante el inicio de 2020 estaba más sesgada hacia defensivos, pero con la corrección del COVID-19 fueron oportunistas en cíclicos. Ahora vuelven a estar más a la defensiva tras el rally.

Donde sí reconoce un sesgo el gestor es en la capitalización media. En el DPAM Equities Europe Sustainable predominan las empresas mid-cap europeas. “En Europa las mejores compañías están en el espacio de la mediana capitalización. A diferencia de Estados Unidos, donde los ganadores son las megaempresas, en Europa las mid cap dominan sus nichos”, cuenta.