Las perspectivas de 2025 de State Street Global Advisors reflejan un entorno de inversión en constante cambio, donde los inversores deben adoptar estrategias flexibles.
El inicio de 2025 se ha perfilado para los inversores globales como un año de alta incertidumbre. La volatilidad geopolítica, los ajustes en la política fiscal global y la transición hacia nuevas dinámicas de crecimiento económico, han despertado incógnitas sobre las oportunidades y retos que se avecinan en los próximos meses. En este contexto, State Street Global Advisors (SSGA) preguntó a los asistentes a su presentación del Market Outlook 2025, acerca de las preguntas más sonadas en este inicio de año.
El panorama dibujado por los profesionales del sector fue claro: el 38% de los asistentes prevé que Europa sea la gran perdedora en el contexto económico global, seguida de cerca por los mercados emergentes (31%). Según estos datos, EE.UU. se mantiene como la apuesta favorita para los inversores, especialmente en renta variable (66%), liderando los retornos y superando a Europa. En cuanto a sectores, los asistentes destacan las small caps por encima de las large caps (59%). Creen que la concentración actual en las 7 Magníficas y la tecnología rotará hacia otros sectores estratégicos (54%).
Para los profesionales del sector, la economía de EE.UU. mantiene una base sólida pero enfrenta también desafíos significativos. Elliot Hentov, jefe de investigación de políticas macro de SSGA, destaca que se espera que el déficit fiscal se mantenga en torno al 6,5% del PIB, sin grandes impulsos fiscales hasta finales de 2025. Mike Metcalfe, director de análisis estratégico de la insitución señala que los inversores están comenzando a reducir su exposición a las tecnológicas de EE.UU., diversificando hacia Europa y mercados emergentes. Por su parte, Antoine Lesné, jefe de estrategia de SPDR ETF en EMEA en SSGA, resalta el potencial de la renta fija y la importancia de estrategias de diversificación en un entorno de tasas aún elevadas.
La incertidumbre fiscal en EE.UU. marcará la política monetaria
Para Elliot Hentov la clave del 2025 radica en la incertidumbre fiscal y sus efectos en la economía estadounidense. Destaca que, aunque el crecimiento será algo inferior al del año pasado (cercano al 2% en EE.UU.), no se espera una recesión. Además, la inflación parece bajo control, lo que en teoría facilitaría recortes de tasas por parte de la Fed.
Sin embargo, la falta de un presupuesto claro en EE.UU. y el alto déficit del 6,5% crean dudas sobre la sostenibilidad fiscal. Hentov advierte que la Fed podría limitar los recortes de tipos a solo uno en 2025, en lugar de los tres que algunos anticipan. "A pesar de los desafíos, la economía estadounidense sigue posicionándose en cabeza en términos de crecimiento y rentabilidad empresarial", señala.
Otro factor crítico es el impacto de la deuda pública. Los intereses de la deuda alcanzarán el 25% de los ingresos fiscales en 2025, un récord histórico. Hentov subraya que la necesidad de refinanciar deuda a tasas más altas mantendrá la presión sobre el mercado de bonos. Además, la dependencia de EE.UU. de inversores extranjeros para financiar su deuda se está volviendo un factor de riesgo creciente.
En cuanto a Europa, Hentov cree que podría sorprender con un crecimiento superior al esperado, impulsado por pequeños estímulos fiscales en países como Alemania y por la creciente inversión en el sector defensa. "El sector defensa emerge como un área estratégica para la región, con un alto contenido de producción local y su capacidad para generar empleo e inversión", explica Hentov.
Cambios en el posicionamiento de los inversores y rotación de activos
Mike Metcalfe señala que los inversores globales están reduciendo su exposición a las tecnológicas de EE.UU. y diversificándose hacia Europa y otros sectores. Los flujos de enero muestran que Europa ha pasado de estar infraponderada a recibir más asignaciones, especialmente en sectores defensivos como consumo y financieros.
"Los inversores institucionales han comenzado a buscar oportunidades más allá de las grandes tecnológicas, lo que podría impulsar la rotación hacia sectores estratégicos", comenta Metcalfe. El 54% de los profesionales cree que la concentración en las '7 Magníficas' rotará hacia otros sectores, reflejando esta tendencia de diversificación.
A pesar del optimismo en renta variable, Metcalfe reflexiona: "La asignación a bonos sigue siendo baja, lo que plantea la duda de si los inversores están demasiado optimistas con las acciones o demasiado temerosos con la renta fija", reflexiona.
En cuanto a los mercados emergentes, India se posiciona como un mercado emergente dinámico con un crecimiento estable en el segmento de small caps. "Su creciente integración en los índices de deuda en moneda local presenta para State Street una nueva oportunidad de diversificación geográfica", indica Metcalfe.
Small caps y la rotación de sectores como tendencia clave
Antoine Lesné, jefe de estrategia de SPDR ETF en EMEA en SSGA, destaca que las small caps representan una de las oportunidades más destacadas para 2025. "A pesar de su vulnerabilidad a los tipos de interés, estas compañías ofrecen un gran potencial de crecimiento en un entorno de recuperación económica gradual", indica.
El optimismo empresarial en EE.UU. respalda esta tesis. "El índice S&P 500 ha experimentado flujos positivos desde las elecciones, lo que refleja un interés inversor", comenta Lesné. Sin embargo, advierte que la falta de recorte de tipos por parte de la Fed podría frenar su crecimiento.
Por otro lado, destaca que se está observando una rotación desde los sectores tecnológicos hacia industrias cíclicas y de consumo básico, tanto en EE.UU. como en Europa. "Esta tendencia beneficia directamente a las small caps, que suelen responder positivamente a ciclos económicos expansivos", señala.
En los mercados emergentes, la inversión en small caps también presenta oportunidades, especialmente en India y bonos de Arabia Saudita. "La diversificación geográfica y la inclusión de estos mercados en índices de referencia están atrayendo el interés de los inversores", concluye Lesné.